Redacción, Madrid.- Durante el año 2001 fueron dados de alta 4.420.030 enfermos en los hospitales españoles, entre agudos y pacientes de larga estancia. El número de enfermos dados de alta por cada 100.000 habitantes se sitúa en 10.883, lo que implica que prácticamente 11 de cada 100 personas fueron tratadas de un episodio de hospitalización, según se desprende de la última encuesta de morbilidad hospitalaria, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por Comunidades Autónomas, las tasas más elevadas en enfermos dados de alta por cada 100.000 habitantes en el año 2001 corresponden a Baleares, Navarra, Aragón y Cataluña. Por su parte, las tasas más bajas corresponden a La Rioja, Castilla-La Mancha, Andalucía y Extremadura.
El número de personas con enfermedades del aparato circulatorio dados de alta por cada 100.000 habitantes es de 1.387, lo que supone el 12,7 por ciento del total de altas. Este porcentaje es más elevado que el del año 2000 (12,3 por ciento) y supera en 2,4 puntos porcentuales a la participación del año 1995 y en 4,5 puntos porcentuales a la de 1992.
Aparato circulatorio, primera causa de ingresos
Entre las enfermedades del aparato circulatorio más frecuentes se encuentran las enfermedades de la circulación pulmonar, las enfermedades cerebro-vasculares, otras formas de enfermedad isquémica del corazón y el infarto agudo de miocardio. Entre los años 1992 y 2001 las enfermedades del aparato circulatorio han pasado de ocupar el segundo lugar al primero en origen del mayor número de ingresos hospitalarios.
El segundo lugar en altas médicas en 2001 lo ocupan las enfermedades del aparato digestivo, con 1.529 por cada 100.000 habitantes. La participación de este grupo de enfermedades (11 por ciento del total) se mantiene más estable, con un aumento de un punto porcentual respecto a la participación del año 1992 y de 0,5 puntos porcentuales respecto a la del año 1995. Entre las enfermedades del aparato digestivo más frecuentes se encuentran las hernias, los problemas de vesícula y la apendicitis.
Las enfermedades del aparato respiratorio ocupan el tercer lugar (con el 9,2 por ciento del total de altas) manteniendo prácticamente el mismo porcentaje que el año anterior (9,6 por ciento), aunque aumentan su participación en un punto porcentual respecto a la de 1995 y en dos puntos porcentuales respecto a la de 1992. Entre las enfermedades del aparato respiratorio más frecuentes se encuentran la neumonía y la bronquitis.
En el resto de diagnósticos más frecuentes que dan lugar a hospitalización cabe destacar el progresivo descenso de la participación del parto normal, que ha pasado del 8 por ciento del total en 1992, al 5,5 por ciento en 1995, al 3,5 por ciento en el año 2000 y al 3,1 por ciento en 2001. Por el contrario, los tumores malignos han pasado de representar el 4 por ciento de las hospitalizaciones en el año 1992 al 6 por ciento en 2000 y al 6,2 por ciento en el año 2001.
Las enfermedades obstétricas directas (complicaciones relacionadas con el embarazo, trabajo del parto, complicaciones durante el curso del parto) suponen la primera causa de hospitalización de las mujeres, con el 13,3 por ciento del total. En segundo lugar se sitúan las enfermedades del aparato circulatorio (10,5 por ciento), seguidas de las enfermedades del aparato digestivo (8,8 por ciento), las enfermedades del aparato respiratorio (6,5 por ciento), las enfermedades del sistema osteo-mioarticular y tejido conectivo (6,1 por ciento), el parto normal (5,9 por ciento) y los tumores malignos (4,8 por ciento).
En los varones, las enfermedades que dan lugar a más hospitalizaciones son las del aparato circulatorio (con el 15,2 por ciento del total), seguidas por las enfermedades del aparato digestivo (13,9 por ciento), las del aparato respiratorio (12,3 por ciento), los tumores malignos (7,7 por ciento), las enfermedades del sistema osteo-mioarticular (5,9 por ciento) y las fracturas (4,3 por ciento).
Por edades
La edad media de las altas hospitalarias es de 50 años (51 años en los varones y 48 en las mujeres). Por grupos de edades, el mayor porcentaje de altas hospitalarias (16,9 por ciento) corresponde a personas de 65 a 74 años. Dentro de este grupo de edad las enfermedades más frecuentes son las del aparato circulatorio (21,1 por ciento), aparato digestivo (13 por ciento), tumores malignos (11,1 por ciento), aparato respiratorio (9,9 por ciento) y sistema osteo-mioarticular (7,4 por ciento). Para la población de 65 a 74 años las altas hospitalarias por 100.000 habitantes son 19.175, lo que supone que casi dos de cada 10 personas de 65 a 74 años han requerido atención hospitalaria.
El segundo lugar en altas lo ocupa el grupo de personas de 25 a 34 años (con el 14,7 por ciento) como consecuencia de los ingresos de las mujeres por complicaciones de embarazo y parto (30,4 por ciento del total en este grupo de edad) y parto normal (14,5 por ciento).
El tercer porcentaje más elevado de altas hospitalarias lo ocupa el grupo de personas de 75 a 84 años (13,8 por ciento). Las enfermedades más frecuentes de este grupo son las del aparato circulatorio (24 por ciento), aparato respiratorio (13 por ciento), aparato digestivo (11 por ciento), síntomas y estados morbosos mal definidos (5 por ciento) y tumores malignos (4 por ciento). Para la población de 75 a 84 años las altas hospitalarias por 100.000 habitantes son 26.670. Lo que supone que prácticamente tres de cada 10 personas de 75 a 84 años han precisado atención hospitalaria.
El cuarto lugar en altas lo ocupa el grupo de personas de 55 a 64 años (con el 11,7 por ciento del total). Las enfermedades más frecuentes de este grupo de edad son las del aparato circulatorio (16,9 por ciento), aparato digestivo (14,6 por ciento), tumores malignos (10,8 por ciento), sistema osteo-mioarticular (9,1 por ciento), aparato respiratorio (7,7 por ciento) y síntomas y estados morbosos mal definidos (6,7 por ciento).
Para la población de 55 a 64 años las altas hospitalarias por 100.000 habitantes son 12.647, lo que implica que una de cada 10 personas de 55 a 64 años ha necesitado hospitalización.
El grupo de personas de 85 y más años representan en el año 2001 el 5,2 por ciento del total de altas hospitalarias, frente al 4,9 por ciento del año 1999. Para esta población, las altas hospitalarias por 100.000 habitantes son 32.964. Lo que implica que tres de cada 10 personas de 85 y más años han requerido hospitalización. Dentro de este grupo de edad las enfermedades más frecuentes son las del aparato circulatorio (25,4 por ciento), aparato respiratorio (17,1 por ciento), aparato digestivo (11,3 por ciento), tumores malignos (5,9 por ciento) y los síntomas y estados morbosos mal definidos (5,9 por ciento).
En el periodo 1992-2001 la participación relativa del grupo de edades de 65 a 74 años se ha incrementado del 14 al 16,8 por ciento del total de altas, mientras que la del grupo de 25 a 34 años se ha reducido del 17,5 al 14,7 por ciento debido al progresivo descenso de la participación del parto normal y número de embarazos. Por su parte, la participación del grupo de 75 a 84 años se ha incrementado del 12,8 al 13,8 por ciento y la del grupo de edad de 55 a 64 años ha disminuido del 12,9 al 11,6 por ciento.
La estancia media por alta hospitalaria es de 8 días en el año 2001, lo que supone una reducción de tres días respecto a los 11 registrados de media en 1992. Por grupos de diagnósticos las estancias más elevadas (sin considerar las enfermedades mentales) corresponden a tumores malignos (12 días), otros traumatismos y envenenamientos (10 días), fracturas (10 días), aparato circulatorio (9 días), enfermedades perinatales (9 días) aparato respiratorio (8 días) y aparato digestivo (7 días).
El número de altas hospitalarias de personas que ingresaron por urgencias representó el 56,7 por ciento del total en el año 2001, lo que supone un incremento del 2,7 por ciento respecto al año 2000 y un aumento del 8,9 por ciento respecto a 1992.
Descenso de la mortalidad
Por otra parte, en el año 2001 se produjeron en España 360.131 defunciones, de las que 189.714 correspondieron a varones y 170.417 a mujeres. La tasa bruta de mortalidad se sitúa en 887 fallecidos por cada 100.000 habitantes, lo que supone una disminución del 1,8 por ciento respecto al año anterior. El grupo de causas de muerte de mayor incidencia se mantiene estable, si bien destaca la enfermedad de Alzheimer que pasa del puesto 15 al 10.
Según estadísticas también divulgadas por el INE, la mortalidad por enfermedades cardiovasculares permanece como primera causa de muerte en España, representando el 34,5 por ciento del total de defunciones. Entre las causas cardiovasculares más frecuentes, las enfermedades isquémicas del corazón (infarto agudo de miocardio, angina de pecho, etc.) se mantienen como la primera causa de muerte, con 38.788 fallecidos.
También se mantienen en segundo lugar los tumores como responsables del 27,1 por ciento del total de fallecimientos. En el año 2001 se produjeron 97.714 defunciones por esta causa, frente a las 95.072 de 2000, lo que supone un incremento del 2,8 por ciento.
Por género, la importancia relativa de las distintas causas de muerte es diferente. En las mujeres se mantiene como primera causa de muerte las enfermedades cerebrovasculares, con 21.588 defunciones. Le sigue en importancia las enfermedades isquémicas del corazón, con 16.602 muertes.
Atendiendo a los tumores malignos en las mujeres, el cáncer de mama es el más significativo con 5.914 defunciones, con lo que experimenta una subida de un 4,2 por ciento sobre el año anterior. Le sigue en importancia el cáncer de colon, que ha ocasionado 4.072 muertes.
Cabe destacar también que las defunciones por neumonía han descendido en mujeres un 10,8 por ciento.
Entre los hombres, la causa de muerte más frecuente sigue siendo las enfermedades isquémicas del corazón, con 22.186 defunciones durante el año 2001. La segunda causa es el cáncer de bronquios y pulmón, con 16.234 fallecimientos, con lo que se incrementa en un 5 por ciento respecto a 2000.
Detrás del cáncer de bronquios y pulmón se sitúa el cáncer de próstata, con 5.659 muertes y el de colon, que ha sido responsable de los fallecimientos de 5.047 hombres (un 6,5 por ciento más que en el año anterior).
La enfermedad de Alzheimer fue la responsable de 6.280 defunciones, un 16,7 por ciento más que en el año 2000. Los accidentes de tráfico fueron responsables de 5.696 muertes, 323 menos que en el año anterior. A pesar de ello, continúa siendo la principal causa de muerte en los jóvenes de 15 a 34 años, con 1.878 fallecidos varones y 452 mujeres. En cuanto a la mortalidad por SIDA/VIH continúa descendiendo. En el año 2001 fue responsable de 1.635 muertes, un 4,8 por ciento menos que en el año anterior.
Por último, los fallecimientos por enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores bajan un 8,9 por ciento con respecto al año 2000. Asturias, Aragón y Galicia presentan las tasas de mortalidad más elevadas.
Mortalidad por Comunidades Autónomas
La mortalidad está directamente relacionada con el envejecimiento de la población y así lo reflejan los datos por Comunidades Autónomas. En el año 2001 las tasas más altas de fallecidos por cada 100.000 habitantes correspondieron a Asturias (1.122,3), Aragón (1.060,8) y Galicia (1.049,9).
Asturias tiene el mayor número de fallecidos por 100.000 habitantes en seis de las 16 principales causas de muerte (enfermedades isquémicas del corazón, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, demencia, diabetes, cáncer de colon y cáncer de mama de la mujer).
En Aragón se registran las tasas más altas de defunciones por enfermedad de Alzheimer, cáncer de próstata e insuficiencia renal, mientras que Castilla y León tiene las tasas más altas de muertes por cáncer de estómago.
Por su parte, Galicia tiene la tasa más alta por enfermedades cerebrovasculares y enfermedad hipertensiva. La Rioja figura en primera posición por insuficiencia cardiaca y accidentes de tráfico. Extremadura presenta la tasa más alta por cáncer de bronquios y pulmón y neumonía, mientras que tiene la más baja en demencia. Castilla-La Mancha ocupa la segunda posición por diabetes y la Comunidad Valenciana tiene la segunda tasa más alta en muertes producidas por enfermedades isquémicas del corazón. Murcia tiene la segunda tasa más alta en accidentes de tráfico.
Ceuta y Melilla, Canarias y Madrid, tienen las tasas de mortalidad más bajas. Las tasas más bajas de fallecidos por cada 100.000 habitantes corresponden a Ceuta y Melilla (621,3), Canarias (710,7) y Madrid (720,7).
Ceuta y Melilla tienen las tasas más bajas en siete de las 16 principales causas de muerte (cáncer de colon, neumonía, enfermedad de Alzheimer, cáncer de estómago, cáncer de mama de la mujer, accidentes de tráfico y cáncer de próstata); Canarias presenta las tasas más reducidas en otras cinco (enfermedades cerebrovasculares, insuficiencia cardiaca, cáncer de bronquios y pulmón, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores e insuficiencia renal) y Madrid tiene la menor tasa en diabetes.
Cantabria presenta la tasa más baja de defunciones por enfermedades isquémicas del corazón, mientras Navarra tiene la tasa más baja por enfermedad hipertensiva. País Vasco tiene la segunda tasa más baja en insuficiencia cardiaca e insuficiencia renal. Cataluña registra la segunda tasa más baja de muertes por neumonía, aunque tiene la segunda más alta por demencia. Andalucía tiene la segunda tasa más baja de fallecidos por demencia y cáncer de próstata.