Redacción/E.P. El 20 por ciento de los médicos de familia que trabajan en Cataluña sufren el síndrome del ‘burnout’, a causa de "la presión asistencial que sufren", según ha asegurado el representante de la Plataforma 10 minutos en esta comunidad autónoma, Jordi Cebrià, quien advirtió que estas cifras "empiezan a ser intolerables". Parte de esta presión asistencial, según este colectivo médico, se debe a que "hay personas que hacen una sobreutilización de los servicios sanitarios y, además, cada vez tenemos a más personas que llegan a las consultas con crisis de ansiedad".

Además, para Cebrià, el plan de choque para contratar a 255 nuevos médicos y pediatras de A.P. en Cataluña "ha quedado corto". "Todavía tenemos un modelo sanitario muy basado en los hospitales, cuando el primer nivel asistencial tiene mucha capacidad de resolución", añadió. Así, defiende que estos facultativos pueden "hacer seguimientos de embarazos, realizar ecografías o hacer cirugía menor", algo que "actualmente queda reservado a los especialistas", añadió.

Por tanto, y ante las concentraciones previstas con motivo de la jornada de reflexión, convocada por la Plataforma 10 minutos, a nivel nacional, los médicos de primaria catalanes han aprovechado para pedir más capacidad y resolver, así, casos que ahora se atienden en los hospitales y dedicar el tiempo que necesita cada paciente según sus necesidades, aumentar la autonomía de los médicos y su formación.

"La organización de los equipos de Atención Primaria debe adaptarse a las necesidades de la población que atiende: hay ambulatorios que requerirán más trabajadores sociales y otros más psicólogos clínicos", tal como apuntó Cebrià.

Por su parte, el presidente de la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (SCMFiC), Daniel Ferrer-Vidal, ha reclamado "un aumento de los recursos económicos para el primer nivel asistencial", con el fin de "mejorar las condiciones de trabajo de los médicos".

Finalmente, el representante de esta plataforma en Cataluña, aseguró que el tripartito catalán "sintonizaba mucho con las peticiones" pero "ahora ya se ha terminado el paréntesis de cortesía para que apliquen las acciones planificadas en su programa electoral".