Redacción,Sevilla.- El estado nutricional de los niños, resulta fundamental como indicador de bienestar, y también repercute sobre su calidad de vida y desarrollo y crecimiento. Además en periodos de enfermedad puede tener consecuencias directas y condicionar su evolución. En este sentido, se sabe que el…
Redacción,Sevilla.- El estado nutricional de los niños, resulta fundamental como indicador de bienestar, y también repercute sobre su calidad de vida y desarrollo y crecimiento. Además en periodos de enfermedad puede tener consecuencias directas y condicionar su evolución. En este sentido, se sabe que el 20 por ciento de los niños que son hospitalizados presentan malnutrición al ingreso y que en patología quirúrgica la deficiencia nutricional afecta al 17 por ciento de los niños hospitalizados. Estas son algunas de las conclusiones que se han puesto de manifiesto durante la mesa redonda 'La nutrición clínica en la edad pediátrica', en el marco del IV Congreso de la Sociedad Española de Nutrición Básica y Aplicada (SENBA), celebrado en Sevilla.
Ante esta situación, los expertos abogan por efectuar valoraciones nutricionales tempranas al ingreso de dichos niños en las diferentes unidades pediátricas a fin de discernir si es necesario que estos pacientes dispongan de un soporte nutricional adecuado y decidir sobre cuál ha de ser dicho soporte. Al mismo tiempo, dichos especialistas defienden un seguimiento continuo y exhaustivo del estado nutricional de estos pacientes junto con la formación de Unidades de Nutrición Infantil Pediátrica capaces de integrar un enfoque global de la enfermedad de estos niños y al tiempo hacer un diagnóstico certero y exhaustivo de su estado nutricional. Así, el doctor Jaime Dalmau, jefe de la Unidad de Nutrición y Metabolismo del Hospital La Fe de Valencia, afirma que 'lo deseable es que todos los hospitales tengan una unidad de nutrición pediátrica, puesto que si la nutrición en Pediatría es importante, aún más en niños hospitalizados'
Según detalla Dalmau que 'la malnutrición en el niño hospitalizado es un hecho frecuente tanto por la propia enfermedad, aunque se presenta en mayor medida en enfermos oncológicos, niños prematuros con patología respiratoria, niños intervenidos con alguna resección intestinal o niños con cardiopatía congénita. Ese estado nutricional deficiente conlleva un aumento de la morbilidad de estos pacientes, que a su vez condiciona su tiempo de hospitalización, como de mortalidad. 'De ahí, Dalmau, 'la importancia de hacer una correcta valoración del estado nutricional de cada paciente ingresado con el fin de prevenir y tratar precozmente la malnutrición'.
Tal y como ha indicado el jefe de la Unidad de Nutrición Clínica y Dietética del Hospital Infantil Virgen del Rocío de Sevilla, Manuel Pérez, 'en estos niños enfermos hay que tener en cuenta además que las consecuencias de su malnutrición pueden incluso ser más importantes que su enfermedad, de ahí la importancia de hacer un diagnóstico nutricional precoz. Aún así, el doctor Pérez lamenta que 'todavía hay demasiados casos de malnutrición en niños que podrían corregirse con una buena intervención nutricional y un buen soporte nutricional adecuado, no sólo para paliar y corregir sino también para prevenir su aparición'.
En cuanto al tratamiento nutricional de estos niños, el doctor Dalmau señala que se basa en el aporte energético y de principios inmediatos en proporción adecuada. Dada su vulnerabilidad estos niños deben ser valorados por un especialista durante la hospitalización.
Sólo el 25 por ciento de los celiacos sabe que padece la enfermedad
Por otra parte, la doctora Isabel Polanco, Profesora Titular de Pediatría de la Facultad de Medicina de la UAM y jefe de Servicio de Gastroenterología y Nutrición Pediátrica en el Hospital La Paz de Madrid, ha abordado durante este congreso la enfermedad celiaca, y ha señalado que 'sólo el 25 por ciento de los celiacos saben que lo son, bien porque su médico no sospechó la existencia de la enfermedad o porque los pacientes no presentaban síntomas'
'El único tratamiento disponible para esta patología es seguir de por vida una dieta sin gluten, restringiendo el consumo de trigo, cebada y centeno que se encuentran en la mayoría de los productos manufacturados', ha añadido la doctora Polanco. 'Cuando un niño o un adulto es diagnosticado con enfermedad celiaca', dice la doctora Polanco, 'el primer paso es explicarle que su intolerancia al gluten dura toda la vida pero que, aún así, no resulta un problema, puesto que el gluten no es un alimento esencial.'
Por otra parte, ha continuado la experta 'también se les enseña a mirar la etiqueta, se les pone en contacto con asociaciones de celiacos que le enseñarán a comer sin gluten de la forma más agradable pero más estricta posible, para evitar que se presenten efectos secundarios indeseables,y finalmente, se hacen controles periódicos para un seguimiento exhaustivo'.