EL MEDICO INTERACTIVO, Madrid.- Una persona con migraña grave -enfermedad tan discapacitante como la ceguera o la tetraplejia, según la OMS- trabaja una media de 6 días/mes con fuertes dolores de cabeza, lo que le provoca una media de 12 días de baja al año. Mayor información y el uso de un tratamiento específico para el control de la migraña permitirían cambiar radicalmente este escenario. Éstas son algunas de las conclusiones más importantes del mayor estudio -publicado en el último número de la revista Medicina del Trabajo, publicación oficial de la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo Medicina del Trabajo- realizado hasta la fecha en España para evaluar el impacto de la migraña en el ámbito laboral.
El referido estudio es el primero que se hace por los propios médicos de empresa, que son quienes verdaderamente conocen la realidad del día a día del trabajador que sufre la enfermedad. El estudio ha sido patrocinado por MSD y dirigido por la doctora Teofila Vicente, con una plantilla de más de 60.000 trabajadores de Correos.
Del estudio se desprenden datos como que la migraña afecta a 1 de cada 3 trabajadores. que el 61 por ciento de los afectados demanda ayuda médica. y, en general, se califica como baja la calidad asistencial recibida antes de comenzar el programa de intervención de esta investigación.
De la misma forma, el 77,3 por ciento de los trabajadores con migraña reconoce que su enfermedad afecta de forma importante a su vida familiar y a su vida social. el 60 por ciento considera que esta enfermedad altera su carácter y comportamiento. y el 50 por ciento afirma que en varias ocasiones han tenido que renunciar a actividades sociales y de ocio.
'Debemos dar una especial importancia a la formación e información sobre las cefaleas, no sólo entre los pacientes afectados, sino también entre los médicos responsables de tratar esta patología, con el objetivo prioritario de conseguir un mejor control de una enfermedad crónica y altamente incapacitante para quien la sufre', explica la doctora Teofila Vicente, del Servicio Médico de Correos, y directora de esta investigación.
Por su parte, el doctor Javier Sánchez Lores, presidente de la Asociación Española de Especialistas en Medicina del Trabajo (AEEMT), ha manifestado que 'es muy importante que los médicos del trabajo estemos concienciados de la realidad de este problema ya que habitualmente somos los primeros en tener contacto con los trabajadores que sufren migraña'. En este sentido el doctor Sánchez destaca la labor que desde la Sociedad Científica que preside se lleva haciendo desde hace varios años, y que incluye actividades de formación para la mejora del diagnóstico y abordaje terapéutico de la migraña.
'Hay que pensar 'indica el presidente de la AEEMT- que la mayor incidencia de la migraña se produce en la banda de edad en la que la persona es más productiva, pudiendo ocasionar una significativa disminución del rendimiento laboral. La incomprensión que este hecho puede producir entre las personas del entorno profesional del paciente, hace que la afectación sea aún mayor'.
Y es que como se argumenta desde esta entidad, extrapolando el estudio, una empresa puede ahorrar 1.200 euros al año por empleado, siempre y cuando el trabajador esté bien tratado y controlado. Los tratamientos específicos contra la migraña no sólo aumentan la productividad laboral del empleado, sino también su calidad de vida en términos sociales, familiares y de ocio.
Vacío en educación sanitaria
Sin duda la migraña constituye un gran vacío en la educación sanitaria actual, que se refleja en el abuso y la automedicación con fármacos para tratar los dolores de cabeza simples, pero que no son eficaces para la migraña. Esta automedicación excesiva está provocada en gran medida por una insatisfacción, causada en el 53 por ciento de los casos porque el paciente considera que el médico no se interesa por la patología y el tratamiento, en el 24 por ciento porque no le presta atención y, por último, en el 15 por ciento porque no le entiende.
La solución se encuentra en realizar un diagnóstico rápido y correcto y prescribir un tratamiento adecuado, ya que las crisis migrañosas, si no se tratan, pueden durar de 4 a 72 horas.
La doctora Vicente y el doctor Sánchez consideran, por tanto, esenciales para paliar el impacto de la enfermedad, tanto la mejora en la formación de los médicos para reconocer los síntomas y perfeccionar así el diagnóstico y el tratamiento, como la promoción de campañas sociales de educación para aumentar el conocimiento de la enfermedad entre los ciudadanos.