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El manejo de la hiperplasia benigna de próstata requiere un abordaje multidisciplinar y coordinado entre Atención Primaria y Urología. Al ser una patología prevalente en varones mayores de 50 años, es imprescindible una atención conjunta de ambas especialidades, y dependiendo de la evolución de la patología, el peso recaerá sobre Primaria o sobre Urología.
Según la Asociación Española de Urología, “la HBP es la enfermedad más frecuente de la próstata, la segunda causa de ingreso por intervención quirúrgica en los varones y el primer motivo de consulta en los servicios de Urología”.
Ante dicha situación, es importante establecer protocolos de actuación conjunta de los que formen parte las distintas especialidades médicas implicadas en el manejo de dicha patología prostática. Estos protocolos deben girar en torno a la coordinación de los distintos niveles asistenciales para garantizar un beneficio a los pacientes.
Evaluación inicial
Hay que tener en cuenta que el médico de Primaria desempeña un papel clave en la evaluación inicial y en los primeros pasos del tratamiento de la HBP. Es en Primaria donde se detectan los primeros síntomas y donde primero consultan los afectados. Dependiendo de la sintomatología y su gravedad, el médico de Primaria deriva al paciente a Urología para que continúe su diagnóstico y empiece el tratamiento. Los primeros síntomas que hacen sospechar la presencia de hiperplasia benigna de próstata son los síntomas del tracto urinario inferior, que pueden ser de vaciado, posmiccionales o de llenado. No obstante, en este contexto hay que considerar el estigma que aún existe sobre los STUI, lo que hace que, en ocasiones, se retrase la consulta. Muchos pacientes no acuden a su médico de Primaria hasta que sus síntomas ya son graves y afectan considerablemente a su calidad de vida.Intervención temprana
Una intervención temprana puede mejorar drásticamente la calidad de vida del paciente. Desde Primaria, al ser la puerta de entrada al sistema, se debe reforzar las pautas para la detección precoz de la sintomatología prostática, lo que hará que se tomen cuanto antes las medidas adecuadas para su manejo, con la consiguiente reducción del gasto sanitario global que tienen estos pacientes. Los médicos de familia se encuentran en una posición adecuada para ayudar a muchos pacientes que presentan STUI en su fase inicial. Dado el impacto sustancial que esta enfermedad tiene la calidad de vida del paciente, el reconocimiento precoz de los síntomas y el tratamiento rápido desempeñan un papel fundamental en su evolución. Por eso, es fundamental conocer y comprender los distintos tratamientos, sus ventajas y sus efectos adversos.Consultas
Desde la AEU recuerda que una parte nada desdeñable de los varones que acuden a sus consultas es por los problemas antes comentados y gran parte de ellos se atienden en Primaria para la detección inicial de sus síntomas, su seguimiento y tratamiento. En este escalón asistencial se prescribe teniendo en cuenta la sintomatología que presenta el paciente, si tiene o no otras patologías y su expectativa de vida y de calidad de vida. Es importante que, tanto desde Primaria como desde Urología, se le planteen al paciente las opciones terapéuticas más adecuadas para su patología, pero es desde la puerta de entrada al sistema sanitario donde se suele llevar a cabo el asesoramiento sobre las modificaciones en el estilo de vida que le pueden ayudar a manejar sus STUI. Además, el especialista de Primaria le puede ofrecer información sobre los tratamientos disponibles, tanto farmacológicos como quirúrgicos. En el seguimiento del paciente con HBP el médico de Primaria también tiene mucho que decir, sobre todo, en los casos en los que no es necesaria la cirugía. La coordinación entre las dos especialidades es clave para garantizar la continuidad asistencial y que el paciente reciba los cuidados más adecuados según los vaya necesitando, en función de su evolución y de la respuesta al tratamiento.Referencia:
- A Practical Approach for Primary Care Practitioners to Evaluate and Manage Lower Urinary Tract Symptoms and Benign Prostatic Hyperplasia. Bruce W. Sperry, Stephen Summers, Darshan Patel, Morgan Garcia and Catherine Bandekoa. Federal Practitioner. DOI: 10.12788/fp.0197.