Redacción, Madrid.- Un estudio de la Sociedad Española de Neurología (SEN) sobre la situación de la asistencia neurológica pública en España revela que esta especialidad está "firmemente consolidada" en el sistema sanitario público español, encontrándose a la cabeza de la demanda ciudadana como especialidad médica,…
Redacción, Madrid.- Un estudio de la Sociedad Española de Neurología (SEN) sobre la situación de la asistencia neurológica pública en España revela que esta especialidad está 'firmemente consolidada' en el sistema sanitario público español, encontrándose a la cabeza de la demanda ciudadana como especialidad médica, aunque su contenido, las enfermedades neurológicas, es poco conocido, todavía, por la mayoría de los ciudadanos.
La encuesta se ha presentado en el marco de su LVII Reunión anual de la Sociedad y tiene por objetivo la obtención de datos comparativos y actualizados relativos a la situación de la asistencia neurológica pública en cada Comunidad Autónoma, para contribuir a la mejor planificación en el sistema sanitario español. El estudio se ha llevado a cabo en el año 2005 en 133 hospitales (supone una muestra del 80 por ciento) pertenecientes a 13 Comunidades Autónomas con la colaboración de las Sociedades Autonómicas de Neurología. El Estudio recoge datos relativos a la demanda de asistencia neurológica y a la oferta de recursos de que se disponen, así como de la capacidad docente e investigadora en Neurología.
Según los datos recogidos en el estudio se puede afirmar que la asistencia neurológica pública en España en cuanto a la calidad, tiene un buen nivel, por la homogénea formación y el excelente nivel de conocimientos de los neurólogos españoles, y por la dotación tecnológica con que cuentan los hospitales públicos. En cuanto a los recursos (humanos y de tecnologías), muestra importantes diferencias de unas comunidades autónomas a otras (con carencias en algunas y distribución dispar en otras). En cuanto al acceso de la población al neurólogo, así como a unidades especializadas, también evidencia grandes diferencias territoriales y, en algunas comunidades autónomas, con diferencias entre provincias y entre los habitantes del medio rural y urbano.
Se observan carencias preocupantes en cuanto a la oferta de asistencia neurológica urgente. La mayoría de los hospitales públicos españoles, incluso algunos hospitales de tercer nivel, no disponen de atención neurológica continuada, señala el informe.
El número de derivaciones a consultas externas por patología neurológica se ha incrementado notablemente en los últimos tres años en la mayoría de las Comunidades Autónomas. La frecuentación de las primeras consultas oscila entre 8 y 19 pacientes por mil habitantes y año. Las comunidades con el índice más alto de visitas son Asturias, Aragón y Madrid, y las que lo tienen más bajo son Castilla León, País Vasco y Baleares.
A finales de 2004 había entre 50.000 y 75.000 pacientes en lista de espera para recibir atención neurológica por primera vez. La demora media para consulta de pacientes nuevos en lista de espera oscila entre los 35 y los 120 días, siendo Aragón, Madrid y Canarias quienes encabezan la lista de comunidades con más alto índice de demora en consultas neurológicas.
También se señala en el estudio que el número de ingresos en neurología en Asturias, País Vasco y Valencia es el doble que el de Andalucía, Canarias o Madrid.
Escasez de neurólogos
El número de neurólogos por cada cien mil habitantes, en 2004, era de 2,52, media similar a la publicada en 1997. El incremento respecto a 1997 ha sido más importante en las Comunidades Autónomas de Murcia (2,84), Extremadura (2,13), Castilla La Mancha (2,48), Castilla-León (2,26) y Asturias (3,20). En Andalucía la cifra es de 1,77 (inferior a la del resto de las CC.AA., aunque con una distribución muy irregular).
Esta cifra media es considera insuficiente por la SEN debido al constante incremento de la demanda y la persistencia de listas de espera todavía elevadas, por la necesidad de ofertar atención continuada durante 24 h. en todos los hospitales de especialidades y regionales. por la existencia de un importante número de hospitales comarcales que no ofertan asistencia neurológica especializada. por el número escaso de unidades neurológicas especializadas. y por la necesidad, advierte, de potenciar la investigación en neurociencias.