El benznidazol es el fármaco de primera elección para la enfermedad de Chagas. Actualmente, está indicado en el tratamiento de la fase aguda de la enfermedad. También en la transmisión congénita y en las reactivaciones de personas inmunodeprimidas. Sin embargo, su eficacia en la fase crónica es mucho más dudosa y objeto de controversia.
Para analizar esta cuestión, área de Enfermedades Infecciosas del CIBER (CIBERINFEC), del Centro Nacional de Referencia de Enfermedades Tropicales, del Hospital Ramón y Cajal y el Instituto Ramón y Cajal de Investigación Sanitaria (IRYCIS) han realizado un metanálisis. Del mismo se concluye que, en el caso de los niños en fase crónica, el tratamiento es efectivo. Sin embargo, en los adultos muestra un efecto positivo escaso.
La enfermedad de Chagas es una enfermedad causada por el parásito Trypanosoma cruzi, que es endémica en el Sur de Estados Unidos y toda América Latina, donde representa un problema de salud pública. En Europa, se estima que hay unas 123.000 personas infectadas, de las que más casi 87.000 se localizan en España.
Eficacia de benznidazol
En la actualidad existen dos únicos tratamientos, que datan de la década de los 60 y los 70. El primero es el ya citado benznidazol. Este es generalmente el fármaco de primera elección. La otra opción es nifurtimox. Estos medicamentos presentan una mala tolerancia y es frecuente su suspensión debido a sus efectos adversos. Además, existe mucha incertidumbre sobre su indicación, posología y beneficios, especialmente en poblaciones adultas con infección crónica.
Por ello, este equipo del CIBERINFEC ha llevado a cabo una revisión de la literatura y metaanálisis que actualiza el realizado en 2009 sobre la eficacia del tratamiento con benznidazol Para llegar a estos resultados se han analizado 17 estudios en los que participaron 6.640 pacientes. Específicamente, se centraron en evaluar la efectividad del fármaco para prevenir la evolución clínica de la enfermedad. También ensu capacidad de causar seroreversión.
“El benznidazol no demostró beneficio en el tratamiento de pacientes con enfermedad de Chagas crónica que presentan miocardiopatía establecida”, apunta José A. Pérez Molina, jefe de grupo del CIBERINFEC en el Hospital Ramón y Cajal y otro de los coordinadores del estudio. No obstante, “los datos sobre el tratamiento de la infección crónica indeterminada son insuficientes, por lo queda todavía un área de investigación por cubrir muy importante”, subraya.