E.P., Sevilla.-Alrededor de un 25 por ciento de todas las patologías conocidas tienen una base u origen psicosomático, es decir, están producidas por factores psicológicos como la hipocondría o la personalidad alexitínica (dificultad del paciente para exteriorizar los problemas psicológicos, lo que deriva en trastornos biológicos), según ha señalado el presidente de la Sociedad Andaluza de Medicina Psicosomática (SAMP), el internista Manuel Álvarez Romero.
Éste apoyó su afirmación en los últimos estudios desarrollados en este campo en el Hospital Universitario de Zaragoza, en Barcelona y en Córdoba, investigaciones de las que dijo "toman por primera vez en consideración los factores emocionales como desencadenantes de trastornos biológicos".
Del mismo modo, dicho experto destaca que dos de cada diez personas sufrirán, al menos una vez en su vida, "algún trastorno derivado de problemas psicosomáticos que presente". Por ello, aboga por impulsar este tipo de disciplina entre los médicos de Primaria, ya que, dijo, "son los primeros en reclamar más formación en este campo, puesto que muchas de las dolencias que presentan sus pacientes, la mayoría ancianos o crónicos, tienen origen psicosomático".
En este sentido, la vicepresidenta de SAMP, Francisca López Checa, subraya que "cualquier tipo de patología, sea cual sea, tiene un componente psicosomático ", y asegura que la aplicación "de la ‘medicina dialogante’, es decir, aquella en la que el médico escucha al paciente y atiende a sus posibles componentes psicológicos y de estado emocional, permitiría reducir el número de fármacos y sustituir los medicamentos placebo por una atención más emocional". Igualmente, resalta que con la aplicación de esta disciplina "también conseguiríamos reducir las listas de espera, así como el número de enfermos crónicos".
Respecto a la sintomatología que puede hacer sospechar que se está ante una disfunción psicosomática, destacan las cefaleas, la falta de sueño, los dolores estomacales, las taquicardias o los dolores en el pecho, unido al estrés.