El tabaco tarde o temprano
enferma o mata, aunque se
fumen tres o cuatro cigarrillos
al día. Cada cigarrillo cuenta y
los datos hablan por sí solos:
un solo cigarrillo reduce la vida
del fumador entre 7 y 11 minutos,
lo que supone que la esperanza
de vida de un fumador
medio se verá mermada
alrededor de una década.
La buena noticia es que si
deja de fumar hoy notará que
algo está cambiando en su organismo
en apenas 20 minutos,
cuando la tensión arterial
y el pulso vuelvan a la normalidad,
y cuando lleve diez
años 'libre de humo' su riesgo
de sufrir algún problema de
salud relacionado con el tabaquismo
apenas se diferenciará
del de una persona que nunca
ha fumado.
Si le queda alguna duda,
tome nota de estos datos: un
solo cigarrillo aumenta de forma
aguda la presión arterial,
incrementa la frecuencia cardiaca
de 10 a 15 latidos por
minuto y el riesgo de sufrir un
infarto agudo de miocardio o
una angina de pecho. Es más,
como degrada la vitamina C
del organismo, el sistema inmunológico
se vuelve más vulnerable
y por tanto aumenta
el riesgo de enfermedad.
Es cierto que en el caso de
determinadas enfermedades,
como el cáncer de pulmón, se
da la regla de que a mayor número
de cigarrillos mayor es el
riesgo, pero en otras tantas,
como las patologías cardiovasculares,
el riesgo aumenta por
el mero hecho de fumar, aún
cuando las dosis sean bajas.
Aún así, la realidad es que fumar
menos de cinco cigarrillos
al día triplica el riesgo de morir
por un infarto o un cáncer de
pulmón.
Falsos mitos
Ni nadie es inmune al daño
que el tabaco causa en el organismo
ni existe una manera
'segura' de fumar. Si fuma cigarrillos
'light' porque piensan
que son menos dañinos para
su salud no se engañe. Pese a
su apariencia más 'benévola'
este tipo de tabaco deteriora
el flujo sanguíneo cardiaco
tanto como el normal.
Y si cree que porque lleva
20 años fumando y no ha notado
que el tabaco le perjudica
está a salvo, está muy equivocado.
El hecho de que no
tenga tos matutina ni le falte
el aire cuando suba escaleras
no significa nada. Primero porque
los efectos sobre el aparato
respiratorio son sólo una de
las 26 enfermedades que causa
el tabaco, además de empeorar
otras muchas dolencias,
y segundo porque estos
síntomas no dan la cara en
una vida sedentaria y hasta
que no se enfrente a una actividad
física intensa no sabrá si
los tiene.
FUENTE: Pfizer.