E.P.- Ratas con infarto cerebral grave recuperaron sus funciones normales después de recibir inyecciones intravenosas de unas células similares a las células madre obtenidas de sangre periférica humana, un hallazgo que abre la puerta a otra potencial terapia celular para tratar esta enfermedad.

Según las conclusiones de un estudio de investigadores de la ‘University of South Florida Center of Excellence for Aging and Brain Repair’ de Estados Unidos que publica la revista Cell Transplantation, esta es la primera demostración de que estas células de sangre periférica estimuladas promueven la recuperación funcional después de un infarto.

Los donantes de sangre humana recibieron inyecciones de un factor estimulante de granulocitos (G-CSF) para estimular la liberación de células parecidas a las células madre de su médula ósea en el torrente sanguíneo antes de que se recogiera una muestra de sangre.

Al cabo de 24 horas, tras la introducción de estas células, se observaron mejoras significativas en el comportamiento de los animales, que arrojaron resultados casi normales en los tests realizados, casi como los que registraron antes del infarto cerebral.

Las células madre periféricas estimuladas por G-CSF se han convertido en un tratamiento alternativo a los transplantes de médula ósea para pacientes con tumores hemáticos. Se trata de unas células fáciles de obtener que dan lugar a una rápida recuperación de la quimioterapia y a mejores índices de supervivencia.