Redacción, Madrid.- El secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Carlos Amaya, y el presidente de la Asociación Española de Médicos Internos Residentes (AEMIR), Manuel Menéndez, han pedido al subsecretario de Sanidad, Pablo Vázquez, y al director general de Recursos Humanos, Jaume…
Redacción, Madrid.- El secretario general de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Carlos Amaya, y el presidente de la Asociación Española de Médicos Internos Residentes (AEMIR), Manuel Menéndez, han pedido al subsecretario de Sanidad, Pablo Vázquez, y al director general de Recursos Humanos, Jaume Aubía, con quienes han mantenido una reunión, que se dignifique el trabajo de los facultativos en formación 'con jornadas laborales extenuantes y exceso de guardias- y se acepte incrementar sustancialmente sus retribuciones.
Tanto para la CESM como para AEMIR la situación actual de estos facultativos, aunque con variaciones según los diversos servicios autonómicos de salud, es en general 'muy insatisfactoria' en el conjunto del SNS. 'No es concebible que un médico residente del primer año tenga un sueldo bruto ahora de 780 euros, tras 6 años de carrera y después de dedicar otro importante periodo de su tiempo a preparar, y aprobar, el examen MIR', señala Amaya.
Además, el sindicato propone el objetivo de que el futuro laboral de los residentes esté asegurado desde el momento en que aprueben este examen, y ello por dos razones. 'La primera y principal, porque es del todo injusto que se deje en el paro a alguien que tiene a sus espaldas diez o doce años de formación médica, cuando se pasa de la treintena y en bastantes se está casado e incluso se es padre o madre de familia. Y en segundo término, porque es absurdo que el Estado, o sea todos los ciudadanos, hayamos invertido un buen montón de dinero, que fuentes solventes cifran en más de 150.000 euros, para formar a un especialista que luego no tiene posibilidad de trabajar y que se ha de apuntar al INEM o marcharse a otro país, donde sacarán rendimiento a lo que a los españoles tanto nos ha costado', explica Amaya.
Para conseguir esta meta tan deseable, la CESM ha propuesto reiteradamente que se adecue el número de matriculados en los primeros cursos de las Facultades de Medicina a las posibilidades reales de empleo, 'lo que exige unos previos estudios prospectivos que hoy se echan clamorosamente en falta', indica el secretario general del sindicato.
No obstante, y pese a esa carencia de datos acerca de las necesidades futuras de profesionales, hay que reconocer que en los últimos años se ha hecho un notable esfuerzo para incrementar el número de plazas MIR -las convocadas para 2004 ascienden a 6.518-, hasta el punto de que en estos momentos serían suficientes para absorber la demanda si no fuera porque, junto a los alumnos que acaban la carrera, hay una gran bolsa de licenciados de cursos anteriores que acuden también a la prueba.
Elegir especialidad
Junto a la conveniencia, por otra parte, de que se amplíe la oferta de plazas en determinadas especialidades donde ahora hay insuficiencia (Anestesiología y Radiodiagnóstico, entre otras), AEMIR ha pedido el diseño de un nuevo programa formativo, que incluya entre otros aspectos la troncalidad, así como el desarrollo de las tutorías y la asunción progresiva de responsabilidades los ámbitos clínicos y de investigación.
'Sólo así', apunta Carlos Amaya, 'se evitará la paradoja de que en una profesión que debe de ser eminentemente vocacional, más de la mitad de los residentes se muestren hoy contrariados tras no haber logrado ejercer la especialidad deseada'. Y eso no es todo, ya que según una reciente encuesta efectuada en el Hospital Germans Trias y Pujol, de Badalona, el 43 por ciento de los internos se muestran insatisfechos en el ejercicio de la profesión, 'lo que seguramente se deba', argumenta, por su parte, el presidente de AEMIR, 'a la descompensación entre el esfuerzo que se nos pide y las escasas garantías de estabilidad económica y laboral'.
Entre las premisas necesarias para enmendar esta situación, CESM y AEMIR consideran 'vital' el desarrollo normativo de los artículos que en las recientes leyes sobre Ordenación Profesional (LOPS) y Estatuto Marco abren perspectivas favorecedoras para los médicos internos residentes. En este sentido, ambas organizaciones presentaron en el Ministerio un documento, titulado 'Propuesta para el ordenamiento jurídico del médico residente', que confían sea tenido en cuenta.