E.P., Madrid.- El catedrático de Neurología de la Universidad de California de Estados Unidos, Arturo Álvarez-Buylla, ha identificado algunas zonas del cerebro adulto en las que nacen células gliales, según explicó este científico en Madrid en una conferencia impartida en el ciclo 'La Neurobiología en el Siglo XXI', organizado por el Instituto Cajal del CSIC.
Además de identificar células madre en el cerebro, el equipo de este investigador ha descubierto procesos de migración celular en este mismo órgano. Estas células troncales abren una nueva vía para intentar curar procesos neurodegenerativos, ya que, según Álvarez-Buylla, 'lo más importante para tratar de curar algo es tratar de entender cómo funciona'.
Explicó que la aportación más relevante de su hallazgo es que indica qué células son las células madre y cuáles son sus mecanismos normales por los cuales estas se dividen y se regula su división y su formación de nuevas neuronas. 'Una vez que esto ha sido entendido podemos intentar desarrollar formas de manipularlas para reemplazar neuronas múltiples con el fin de lograr la reparación del sistema nervioso', añadió.
En este sentido, este científicos subrayó que el 'gran reto' que resta a su equipo es ver si estas células tienen ese potencial de reparación y encontrar las condiciones para hacer que den lugar a células de reemplazo.
Concretó que las células de reemplazo pueden ser los astrocitos directamente y las células astrocitarias modificadas después de haberles hecho un proceso de cultivo o después de haberlas inducido por algunos factores específicos.
En esta línea, matizó que hay un tipo de células que sirve como raíz inicial de todo un linaje y que resulta, en su opinión, 'fabulosa' porque tiene la capacidad de dividirse muchas veces y da origen a una población enorme de células (célula madre).
'La identificación de estos precursores secundarios es también importante, porque no se conocían y ahora que se conocen podemos tratar de ver cómo se modifican para amplificar el número de células posiblemente útiles para la terapia', afirmó.
Sin embargo, añadió que hasta que no se desarrollen las técnicas para modificar estas células y hacer que se dirijan hacia tipos específicos útiles para la terapia no se conocerá la diferencia entre un tipo de células y otras. Finalmente, señaló como punto más negativo en el sentido de avances en terapia neurológica la falta de conocimientos sobre cómo hacer que estas células madre den lugar a las células que sean útiles para la reparación del sistema nervioso.