Redacción, Lugo.- Cerca de un 32 por ciento de los médicos hospitalarios, más de un tercio, se declara fumador, una cifra algo inferior a la media de fumadores de la población general, según un estudio realizado, recientemente, por la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
Precisamente, los neumólogos junto a los cardiólogos, son los facultativos que menos fuman, entre otras razones, porque tratan con enfermos afectados por enfermedades provocadas por el tabaco. Por el contrario, los facultativos que más fuman son los médicos de Atención Primaria. Entre los médicos, las mujeres son las que fuman menos, con un porcentaje de un 32 por ciento, frente al 36,4 por ciento de los hombres.
Dada la situación, el Colegio de Médicos de Lugo, en colaboración con la Asociación Española de Lucha contra el Cáncer, decidió poner en marcha, recientemente, un grupo de deshabituación tabáquica para médicos, con la finalidad de ofrecer sesiones, durante un período de seis semanas, en las que se combinarán el tratamiento psicoterapéutico y el farmacológico, de acuerdo con las necesidades de cada persona.
Tal como se asegura desde la propia entidad colegial, "es la primera vez que se pone en marcha este tratamiento multidisciplinar que se llevará a cabo dependiendo de las necesidades y del hábito de cada persona".
Así, según se ha previsto, habrá médicos que podrán iniciar el abandono del tabaco en la primera o segunda sesión, principalmente los fumadores que no fuman más de 15 cigarrillos diarios. Otros deberán reducir de forma gradual el consumo de tabaco, combinando distintas marcas con diferentes niveles de nicotina y alquitrán. Además, entrarán en juego tanto los tratamientos sustitutivos de la nicotina como parches y chicles, y en otros casos fármacos y medicamentos no nicotínicos.
Coincidiendo con la puesta en marcha de este primer grupo de deshabituación tabáquica, el Colegio Médico de Lugo acaba de decretar su sede como espacio libre de tabaco, todo con el fin de frenar la adicción de los facultativos "ante los preocupantes índices de tabaquismo entre nuestro colectivo", según ha explicado su presidente, Sven Gunther.
La puesta en marcha de esta iniciativa se ha dirigido a los médicos porque según señala el presidente del Colegio "nos ha parecido aconsejable formar grupos específicos de facultativos que eviten las posibilidades de encontrarse con los propios pacientes", aunque, no se descarta que más adelante se realicen este tipo de actividades con la población en general.
Al respecto, uno de los responsables del curso, el doctor Manuel Varela, argumenta que "están habituados a ver en sus consultas a pacientes con patologías derivadas del tabaquismo y pese a ello un tercio de los médicos de los hospitales se declara fumador". "Sin embargo, -tal como ha añadido- el convivir con estas enfermedades también implica que los facultativos sean uno de los colectivos más motivados para dejar de fumar".