En el seguimiento de los pacientes con estatinas hay que valorar la aparición de ciertos efectos adversos por si es necesario ajustar la pauta para seguir obteniendo los beneficios en la reducción del riesgo cardiovascular.
16 de enero 2024. 9:00 am
En la valoración de los efectos adversos de las estatinas se debe tener en cuenta varios aspectos, como son el manejo de los síntomas musculares asociados al uso de estatina. Si se da dicha situación, hay que reducir la dosis pautada en un principio y…
En la valoración de los efectos adversos de las estatinas se debe tener en cuenta varios aspectos, como son el manejo de los síntomas musculares asociados al uso de estatina. Si se da dicha situación, hay que reducir la dosis pautada en un principio y optar por la pauta combinada de estatinas y ezetimiba.
En este sentido, los factores que pueden predisponer a la aparición de síntomas musculares en pacientes con dislipemia son la realización de ejercicio físico intenso, el consumo excesivo de alcohol, la obesidad y las alteraciones que pueden aparecer en la función renal.
Diabetes mellitus tipo 2
Un efecto adverso que se tiene que valorar es el mayor riesgo de diabetes mellitus tipo 2 en pacientes tratados con estatinas. Existen varias dudas sobre la relación que puede surgir entre la diabetes mellitus tipo 2 asociado al uso de estatinas. Algunos estudios sostienen que el empleo de estatinas puede aumentar la glucosa al impedir, teóricamente, el efecto de la insulina. Aunque no existen hasta el momento una evidencia consistente de este hecho, los beneficios del empleo de estatinas en pacientes con dislipemia y alto o muy alto riesgo cardiovascular en la reducción de los niveles de cLDL superan al riesgo que puede haber de aumento del riesgo de aparición de la diabetes tipo 2.
Función hepática
Otro de los efectos adversos que puede haber por el empleo de estatinas se centra en la función hepática. Para realizar el manejo clínico de elevaciones persistentes en los niveles séricos de transaminasas hepáticas se deben hacer una serie de pruebas entre las que se incluye la ecografía abdominal, una serología de virus hepáticos, proteinograma, determinación de la ferritina y autoinmunidad. También se recomienda hacer una valoración del consumo de alcohol y de la medicación previa que esté tomando el paciente, por si tiene algún efecto hepatotóxico.
Con respecto al deterioro cognitivo con el uso de las estatinas, no suele ser un hecho frecuente, aunque se debe valorar su presencia en determinados grupos de pacientes.
Para la elaboración de este artículo se ha contado con la colaboración de los doctores Andrés Plata Izquierdo, José Luis Ingelmo Redondo, Mª Lourdes Ledesma, Manuel Vicente Arroyo y Alfonso Sánchez Escudero.