S.P.,Madrid.-En vísperas del inicio, en Sevilla, de la tercera edición de la prueba de homologación del título de Medicina de Familia, que tendrá lugar este fin de semana y que se prolongará durante el mes de noviembre, (ver EL MEDICO INTERACTIVO en su edición del 30 de octubre) las Sociedades Españolas de Medicina Rural y Generalista (SEMERGEN) y la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) protagonizan estos días una fuerte controversia en torno a su organización, tal como ha podido saber este medio. El punto central de la discordia radica, al parecer, en la queja lanzada por SEMERGEN sobre su exclusión en esta ocasión en el desarrollo de la prueba.
"Hasta ahora, la colaboración se ha iniciado a través de un contacto previo una vez se aproximan las fechas de realización de la ECOE, con tiempo suficiente para designar a las personas que por parte de nuestra Sociedad van a participar en el desarrollo de la misma", tal como ha explicado a nuestro medio su vicepresidente, Juan Saavedra. " Sin embargo, este año "prosigue- esta toma de contacto se ha ido retrasando sin tener noticias de la semFYC, hasta que hemos podido cerciorarnos de que esta vez no nos van a llamar, siendo su voluntad de que no participemos".
La reacción de la Sociedad Española de Medicina de Familia ante estos reproches ha sido de "extrañeza", tal como ha expresado su presidente, Luis Aguilera, quien asegura que en contra de lo sucedido en anteriores ediciones, ni su Sociedad ni su Junta Permanente, "han recibido petición alguna de colaboración formal o informal ni por parte de SEMERGEN ni de otra organización para colaborar en la realización de la misma". "Sin ir más lejos, -recuerda el máximo responsable de la semFYC- el año pasado dicha solicitud, por parte de la Sociedad Española de Medicina Rural y Generalista, fue realizada por el entonces presidente Andrés Gimeno, estableciéndose en ese momento un ámbito de colaboración absolutamente normalizado, partiendo de la propuesta efectuada por dicha entidad científica para participar en el comité de evaluación y en la coordinación de sedes".
Saavedra, que al igual que Aguilera, reconoce, pese a todo, que "nunca ha existido ningún problema con nuestra colaboración, como lo demuestra que en anteriores ediciones hemos participado al 50 por ciento" se muestra, sin embargo, convencido de que "la semFYC, en esta ocasión, se opone a que estemos presentes en la prueba. Nos da la sensación de que existe algún interés de que, de alguna manera, no participemos en el proceso y no podamos estar presentes durante el mismo".
Argumentos cuyo origen asegura desconocer el presidente de la semFYC, así como "lo que puede haber detrás de ellos, ya que tampoco responden, a nuestro juicio, a las relaciones que existen entre ambas Sociedades Científicas", según sus palabras.
Ante la situación percibida por SEMERGEN, esta Sociedad es partidaria, según indica su vicepresidente, de transmitir tanto a los profesionales que van a participar en la ECOE como al resto de sus afiliados que "tengan en cuenta que entendemos no estar implicados en la ejecución práctica de la prueba y, por tanto, no podremos avalar ni acreditar lo que vaya a pasar en la misma ni los resultados que puedan derivarse". Lo que sí asegura Saavedra es la presencia de algún representante, por invitación del Ministerio de Sanidad, para el "control general" al igual que los tiene la otra Sociedad".
Para el presidente de la semFYC, por contra, "esta clase de declaraciones, además de preocupar tanto a mi Sociedad como a mi Junta Permanente, no producen ningún beneficio ni para el proceso de normalización de la Medicina de Familia, ni para los compañeros que, voluntariamente, han optado por dicho proceso de normalización, y van a presentarse al mismo al igual que lo han venido haciendo más de 2.500 profesionales desde que se inició el mismo en 2002, consiguiéndose únicamente crear un desconcierto entre esos compañeros".
Asimismo, Aguilera confía en que "la situación no tenga efecto alguno sobre el modelo actual de Atención Primaria".
SEMERGEN, por su parte, no quiere concluir, sin antes expresar su interés por la pronta resolución de la situación y asegura, a través de su vicepresidente, sentirse "abierta a cualquier propuesta, aunque vemos difícil a las alturas en las que nos encontramos que el tema quede solventado para este año", pese a que, en su opinión, todo dependerá de la dinámica que la situación vaya adquiriendo.