Redacción, Madrid.-La Fundación para el Estudio, Prevención y Asistencia a las Drogodependencias (FEPAD) ha elaborado, a petición del Plan Nacional de Drogas (PND), el Informe sobre cannabis 2004: análisis de situación y propuestas de actuación en el que se constata el "preocupante" aumento entre los jóvenes del hábito de fumar cannabis. Su consumo de forma crónica "provoca trastornos frecuentes del estado emocional, como ansiedad o depresión", afirma el catedrático de Psicobiología de la Universidad Complutense de Madrid Miguel Navarro.
De acuerdo con la FEPAD, que cita datos del PND, un 30% de los jóvenes ha fumado porros en España. Uno de los factores que recoge el informe, y que ha puesto de manifiesto el director general de Atención a la Dependencia de la Comunidad Valenciana, Bartolomé Pérez Gálvez, es la baja percepción del riesgo y permisividad que tiene la población hacia el cannabis.
De igual forma, el documento alerta sobre la dificultad para concentrarse en el trabajo y los estudios como consecuencia del consumo repetido de cannabis. También se advierte sobre el hecho de que el consumo habitual potencia las sustancias psicoactivas de la nicotina y del alcohol.
Navarro, coautor del informe, insiste en que un consumo habitual "puede traducirse en estados de irritabilidad, nerviosismo y trastornos del sueño. Al mismo tiempo, en pequeñas dosis, esta sustancia actúa como un ansiolítico, lo que provoca que la persona consuma cada vez más para paliar su ansiedad".
Además, uno de cada diez consumidores ocasionales cumplen criterios de adicción y presentan síndromes de abstinencia leves, pero no por ello menos importantes.