El objetivo es identificar con más precisión los restos de proteína monoclonal en el cuerpo del paciente al terminar la terapia midiendo su efectividad y las probabilidades de una recaída.
5 de septiembre 2024. 1:06 pm
El Cancer Center Clínica Universidad de Navarra (CCUN) ha añadido un espectrómetro de masas a sus equipos actuales de diagnóstico. Esta herramienta permite medir la eficacia de los tratamientos en mieloma múltiple. En concreto, el objetivo es identificar con más precisión los restos de proteína monoclonal en…
El Cancer Center Clínica Universidad de Navarra (
CCUN) ha añadido un espectrómetro de masas a sus equipos actuales de diagnóstico. Esta herramienta permite medir la eficacia de los tratamientos en mieloma múltiple.
En concreto, el objetivo es
identificar con más precisión los restos de proteína monoclonal en el cuerpo del paciente al terminar la terapia midiendo su efectividad y las probabilidades de una recaída. Así, tras el oportuno tratamiento, la herramienta permite medir si existe enfermedad mínima residual, es decir, una cantidad mínima de la proteína mielomatosa, que pasaría desapercibida si se mide con los métodos tradicionales y que podría ser indicativa de un mayor riesgo de recaída
Cabe recordar que la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos
(FDA), además, ha aprobado recientemente, que la detección de enfermedad mínima residual en médula ósea por técnicas de citometría de flujo o de secuenciación de alta sensibilidad. Esto permite que pueda convertirse en un marcador para la aprobación precoz de nuevos fármacos.
Espectrómetro de masas
Los últimos años han traído importantes avances en el tratamiento del mieloma que, en muchos casos, han permitido alargar la esperanza de vida. Así lo asegura Jesús San Miguel, consultor senior del CCUN y reconocido experto internacional en mieloma múltiple “Hoy en día podemos estimar que, aproximadamente, entre el 20 y el 30 por ciento de los pacientes con esta enfermedad pueden estar funcionalmente curados, es decir con supervivencias libres de progresión de más de 10 años. Esperamos que esos porcentajes aumenten con procedimientos de vanguardia basados en inmunoterapia, incluyendo anticuerpos biespecificos y células CAR-T'. Los especialistas consideran supervivencia libre de progresión el tiempo en el que el paciente vive en respuesta o con la enfermedad controlada hasta el momento en el que ésta vuelve a progresar. Ahora el uso de herramientas como el espectrómetro de masas permitirán consolidar estos avances.
En este sentido, Álvaro González, director del Servicio de Bioquímica Clínica de la Clínica Universidad de Navarra, señala que, con el espectrómetro de masas “se consigue una
mayor sensibilidad en el diagnóstico que ayuda más específicamente a detectar posibles recidivas, ya que permite al clínico actuar de forma más temprana y adecuada para cada paciente. Por eso, la atención mejora de manera muy notable con esta técnica”.