E.P.- Las células hemáticas que se originan en los fetos son más versátiles que aquellos encontrados en los adultos. En la última edición de la revista Nature Immunology, investigadores del Instituto Pasteur de París (Francia) demuestran que las células precursoras de la sangre fetal difieren de las de los adultos en su capacidad de reaccionar a múltiples claves que dirigen el desarrollo de células B productoras de anticuerpos.

Se ha comprobado que las células B fetales crecen en la presencia del factor linfopoyetina derivada del estroma tímico, TSLP, si bien esta capacidad se pierde al poco tiempo de nacer, mientras que tanto las células B fetales y adultas crecen en presencia de la interleuquina 7.

Estos resultados destacan importantes distinciones en el desarrollo temprano de las células de la sangre en el hígado fetal y de la médula ósea adulta y pueden explicar por qué algunas personas pierden la capacidad de producir anticuerpos, haciéndoles vulnerables a las infecciones recurrentes.