El uso de
agonistas del receptor del péptido similar al glucagón-1 (GLP-1 RA), como la semaglutida y la liraglutida, se ha consolidado como una estrategia eficaz para el tratamiento de la
obesidad y la
diabetes tipo 2. Un reciente estudio de la Clínica Cleveland, publicado en
'JAMA Network Open', ha identificado factores claves que pueden influir significativamente en la
pérdida de peso a largo plazo en pacientes con obesidad tratados con estos medicamentos.
Resultados que varían según el principio activo del medicamento
El estudio incluyó a 3.389 pacientes adultos que recibieron semaglutida o liraglutida entre 2015 y 2022. Según los resultados, los pacientes que tomaron
semaglutida experimentaron, en promedio, una mayor reducción de peso (-5,1%) en comparación con aquellos tratados con
liraglutida (-2,2%). Estos resultados demuestran que la elección del medicamento influye directamente en los resultados de pérdida de peso.
La obesidad como indicación mejora los resultados
Los pacientes que tomaron GLP-1 RA para el tratamiento de la
obesidad también mostraron una mayor reducción de peso en comparación con aquellos que lo tomaron para la diabetes tipo 2. El grupo tratado por obesidad experimentó un cambio de peso promedio del -5,9%, en comparación con el -3,2% en el grupo de diabetes. Esto sugiere que la indicación del tratamiento influye de manera significativa en los resultados de pérdida de peso.
Dosis alta, mejores resultados
La dosis de mantenimiento también juega un papel fundamental. Los pacientes que recibieron una dosis alta de semaglutida o liraglutida lograron una reducción de peso del -6,6%, frente al -3,5% en aquellos que recibieron dosis bajas. Estos hallazgos refuerzan la importancia de ajustar la dosis para maximizar los beneficios en la reducción de peso.
La persistencia con el tratamiento es clave
Uno de los descubrimientos más relevantes del estudio fue la relación entre la
persistencia con el tratamiento y la pérdida de peso. Aquellos pacientes que continuaron tomando sus medicamentos durante al menos un año experimentaron una mayor reducción de peso (-5,5%) en comparación con aquellos que tuvieron una menor adherencia (-2,8%). Este hallazgo subraya la importancia de la
constancia en la medicación para alcanzar resultados óptimos en la pérdida de peso.
Mayor probabilidad de pérdida de peso significativa con semaglutida
Los investigadores también analizaron la probabilidad de lograr una reducción de peso del 10% o más, un objetivo que se asocia con beneficios significativos para la salud. En general, el 37,4% de los pacientes tratados con semaglutida para la obesidad lograron este nivel de pérdida de peso, en comparación con solo el 14,5% de aquellos que tomaron liraglutida. La persistencia con el tratamiento aumentó considerablemente estas probabilidades: el 61% de los pacientes que tomaron semaglutida para la obesidad durante un año lograron una reducción del 10% o más de su peso corporal.
Diferencias según factores demográficos
Los resultados del estudio también revelaron que los
pacientes con un índice de masa corporal (IMC) inicial más alto y aquellos que eran mujeres tenían una mayor probabilidad de lograr una pérdida de peso significativa. Estos datos proporcionan información valiosa para los médicos al momento de diseñar planes de tratamiento personalizados para sus pacientes.
Implicaciones clínicas y futuras investigaciones
El autor principal del estudio, el doctor
Hamlet Gasoyan, señaló que estos resultados podrían ayudar tanto a médicos como a pacientes a comprender mejor los factores que influyen en la efectividad de los medicamentos GLP-1 RA. “La
persistencia es clave para lograr resultados significativos de pérdida de peso, y estos datos proporcionan una base sólida para futuras investigaciones y guías clínicas', añadió el doctor Gasoyan.
Este estudio proporciona
evidencia del mundo real que podría mejorar el manejo de las expectativas de los pacientes sobre los resultados de pérdida de peso a largo plazo con
GLP-1 RA, y refuerza la necesidad de mantener una adherencia constante al tratamiento para lograr beneficios clínicos duraderos.
En definitiva, esta investigación subraya la importancia de personalizar las terapias en función de factores como el medicamento elegido, la dosis, la indicación y la persistencia, lo que podría traducirse en
mejoras significativas en la calidad de vida de los pacientes con obesidad y diabetes tipo 2.