El cannabis, la droga ilegal más consumida en España, cuenta desde ayer con un prospecto descriptivo de sus propiedades en la página web del Col.legi de Farmacèutics de Barcelona (CFB). El documento, dirigido a quienes utilizan la sustancia con fines terapéuticos, ofrece una exhaustiva explicación sobre la composición química del cannabis, sus efectos secundarios, el riesgo de dependencia y las situaciones en que está contraindicado, informa el diario LA VANGUARDIA.
La decisión de ofrecer esta delicada información obedece al hecho objetivo de que el cannabis es consumido a diario por decenas o miles de enfermos, afirmó Rafael Borràs, vocal de drogodependencias del CFB. 'La realidad, al margen del debate legal, es que ese consumo masivo existe y que, a diferencia de Holanda, aquí se hace sin control médico y desconociendo las dosis de principio activo que contiene cada planta --añadió Borràs--. Nuestra intención es disminuir riesgos y evitar daños'.
El prospecto del CFB enumera las enfermedades y malestares en que existe consenso de que el cannabis puede ejercer un efecto benéfico o calmante, no curativo. Entre éstas, cita la esclerosis múltiple, los dolores causados por el cáncer y sus terapias, las infecciones derivadas del sida, los malestares de origen nervioso y el síndrome de Guilles de la Tourette, que provoca tics.
Explicarlo al médico
El texto desaconseja consumir la resina de hachís, por sus altas concentraciones de principio activo del cannabis, y sugiere limitar el uso a las hojas de la planta. También propone al enfermo que, aunque se trata de una droga ilegal, intente comentar con su médico el consumo que está haciendo y las reacciones que experimenta.
'Nuestro grupo de estudio de las drogodependencias ve con muy buenos ojos el proceso que está siguiendo Holanda --asegura Borràs--. Allí, los enfermos toman el cannabis bajo control médico y sabiendo la concentración de lo que reciben. No se puede cerrar los ojos a una sustancia que es consumida por 163 millones de personas en el mundo'.
El documento del CFB desaconseja tomar cannabis a quien sufra trastornos psicóticos, arritmias cardiacas o insuficiencia coronaria, ya que la droga puede agravar esos procesos. También sugiere prescindir de ella cuando se ha de conducir un vehículo y alerta de que el cannabis puede inhibir el efecto de varios fármacos, entre ellos algún antidepresivo. El riesgo de dependencia tras un consumo limitado de cannabis es 'relativamente bajo', indica.