Es de vital importancia saber que, a medida
que va creciendo un niño, necesitará un sistema
de seguridad distinto dentro del coche en
función de su peso y altura. Básicamente, existen
4 sistemas: sillas en sentido contrario al de
la marcha, sillas en sentido de la marcha,
asientos elevadores y cinturones de seguridad.
" Grupo 0 y 0+. Sillas que miran hacia
atrás. Peso: hasta los 13 kg. Edad aproximada:
hasta los 18 meses
Las sillas en sentido contrario al de la marcha
ofrecen mayor protección para la cabeza, el
cuello y la columna del bebé que las sillas situadas
en el sentido de la marcha. El niño se
sujeta a la silla por medio de un arnés de 5
puntos (hombros, caderas y entre las piernas).
Recuerde: Nunca coloque una silla de bebé
en el asiento delantero con un airbag
activado.
" Grupo 1. Sillas que miran hacia delante.
Peso: de 9 a 18 kg. Edad aproximada: de
9 meses a 4 años
Las sillas en el sentido de la marcha protegen
al niño porque el arnés de la silla absorbe el
movimiento hacia delante del niño en el momento
de la colisión y el cinturón del vehículo
mantiene la silla en su sitio. En estas sillas, al
igual que en el grupo anterior, el niño se sujeta
por medio de un arnés de 5 puntos.
" Grupo 2 y 3. Asientos y cojines elevadores.
Peso: de 15 a 36 kg. Edad aproximada:
de 3 a 12 años
Esos asientos "elevan" al niño permitiéndole alcanzar
la altura necesaria para utilizar el cinturón
de adulto del automóvil correctamente.
Por tanto, los elevadores no disponen de correas,
sino que el propio cinturón del coche
sujeta al niño y al elevador. La banda diagonal
del cinturón ha de pasar por encima de la clavícula,
sobre el hombro, sin tocar el cuello, y
la banda ventral lo más bajo posible, por encima
de las caderas, sobre los muslos, y nunca
sobre el estómago. Los elevadores con respaldo
ofrecen mayor protección y resultan más
cómodos.
" Cinturón de adulto altura a partir de los
150 cm de altura del niño. Edad aproximada:
en torno a los 12 años
Los cinturones de 3 puntos también proporcionan
protección al niño cuando sea lo suficientemente
alto como para que, sentado recto
sobre el respaldo del asiento del coche,
pueda doblar las rodillas hasta el borde del
asiento sin deslizarse.
Recuerde: nunca permita que el niño se coloque
la banda del hombro del cinturón de
seguridad debajo