Investigadores de la Clínica Mayo en Rochester (Estados Unidos) han descubierto que el deterioro cognitivo leve afecta más a los hombres que a las mujeres. El estudio, que publica en la revista Neurology, contó con 1.450 ancianos de entre 70 y 89 años, a quienes realizaron un seguimiento durante tres años.
En este periodo un total de 296 participantes desarrolló este deterioro, lo que revela una tasa de incidencia del 6 por ciento anual. Sin embargo, al analizar los datos por sexo se observó que, entre los hombres, la tasa de incidencia fue del 7,2 por ciento, en comparación con el 5,7 por ciento detectado en mujeres.
Según ha reconocido la autora principal del estudio, Rosebud O. Roberts, del Departamento de Epidemiología de la Clínica Mayo, en términos estadísticos, la diferencia significativa que existe entre las tasas de incidencia entre los hombres y las mujeres 'representa un descubrimiento importante para evaluar a los pacientes de DCL'.
Aunque ya se habían publicado anteriormente tasas de incidencia del DCL, este estudio es uno de los pocos que ha sido diseñado específicamente para medir la incidencia del DCL y sus subtipos utilizando criterios publicados.
El estudio ha analizado también con más detalle a los pacientes con DCL, dividiéndolos según si han desarrollado DCL amnésico (DCLa), en cuyo caso la enfermedad afecta al dominio de la memoria, o DCL no amnésico (DCLna).
Del mismo modo, que en los resultados generales, las tasas de incidencia de DCLa y DCLna fueron más elevadas en hombres que en mujeres.
Además, el estudio reflejó que aquellos individuos que sólo contaban con una educación media desarrollaron DCLa o DCLna en mayor medida que los que habían finalizado estudios superiores, con independencia del sexo.
Comprender la distribución de la incidencia del DCL por edad, sexo y otras variables demográficas es fundamental para entender las causas de la enfermedad, así como la forma de prevenir el DCL y su progresión hasta el deterioro completo, es decir, una demencia irreversible, asegura el Roberts.
Por ello, confía en que este estudio ayude a un mejor cuidado de los pacientes que lo padecen, especialmente durante las primeras evaluaciones.