E.P.- Científicos de la Universidad de Leuven (Bélgica) han identificado un nuevo gen, VEGF, que cuando se muta favorece un aumento del riesgo de desarrollar esclerosis lateral amiotrófica, según un estudio publicado en la última edición de la revista Nature Genetics.
En ratones con neuronas motrices dañadas o lesionadas, la introducción de la proteína VEGF demostró un efecto protector de las células afectadas, lo que apunta al potencial terapéutico de esta proteína.
La esclerosis lateral amiotrófica, también conocida como enfermedad de Lou Gehrig, es una enfermedad incurable que habitualmente se da en personas mayores de 40 años. Esta enfermedad causa degeneración neuronal motriz, resultando en un grave desgaste muscular que deriva en la muerte.
Pese a que la esclerosis lateral amiotrófica se puede encontrar en familias particulares, la mayoría de los casos se dan sin antecedentes ni historial familiar y se cree que se deben a la interacción compleja entre diferentes genes y factores medioambientales.
En este nuevo estudio, los autores examinaron el papel de VEGF, un gen que se sabe que está involucrado en el crecimiento de los vasos sanguíneos, característico de la esclerosis lateral amiotrófica.
Testando la variación genética en VEGF, los investigadores encontraron que las mutaciones que retrasan la producción de VEGF resultaban en un aumento del riesgo de desarrollar la enfermedad. En ratones que desarrollan esclerosis lateral amiotrófrica, los autores han encontrado que la adición de una mutación del gen VEGF agravaba mucho más esta enfermedad.
Los ratones paralíticos debido a lesiones en la espina dorsal mejoraron mucho más rápidamente cuando fueron tratados con VEGF de antemano, que aquellos que no recibieron ningún tipo de VEGF. Estos hallazgos se espera que ayuden a identificar a las personas en situación de riesgo de desarrollar esclerosis lateral amiotrófica e indican que el tratamiento con VEGF puede retrasar la aparición de esta debilitadora enfermedad.