E.P.- Una forma de aspirina que libera óxido nítrico parece mantener su eficacia sin dañar las paredes del estómago, según un nuevo estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Perugia (Italia), que ahora publica la última edición de la revista Proceedings of the Nacional Academy fo Sciences (PNAS). En los últimos años, el uso de la aspirina ha aumentado notablemente, porque reduce los riesgos de ataque cardiaco e infarto cerebral. Un efecto secundario de la aspirina, sin embargo, es el daño que produce a las paredes del tracto gastrointestinal.
Este daño está mediado parcialmente por una enzima llamada lipoxina activada por la aspirina, o ATL. Los inhibidores de COX-2, también modulan los niveles de ATL y, por ello, pueden exacerbar los daños gástricos inducidos por la aspirina. En busca de una forma más segura e inocua de aspirina, los autores del presente trabajo estudiaron los efectos de NCX-4016, un derivado de la aspirina que libera óxido nítrico.
Los autores del trabajo administraron NCX-4016 o aspirina regular a 32 voluntarios sanos. La mitad de los voluntarios también recibieron un inhibidor de COX-2. Los voluntarios que tomaron aspirina experimentaron aproximadamente el doble de lesiones gástricas que aquellos que tomaron NCX-4016.
La administración concomitante del inhibidor de COX-2 aumentó el nivel de daño gástrico en los voluntarios que tomaron aspirina, pero no NCX-4016. Estos resultados indican que NCX-4016 podría ser una alternativa más segura para los pacientes con procesos inflamatorios crónicos a los que se les administra inhibidores COX-2.