“La atención multidisciplinaria hace el mejor uso de la combinación de habilidades de la fuerza laboral de salud. Los equipos pueden incluir médicos generales, enfermeras, trabajadores sociales, psicólogos, nutricionistas, promotores de salud, farmacéuticos clínicos, consejeros de actividad física, trabajadores de salud comunitarios y personal de recepción”. Esta es la idea que defiende la Organización Mundial de la Salud y bajo la cual ha decidido poner a España como un ejemplo internacional.
En concreto ha destacado el modelo de Atención Primaria española y su capacidad para integrar equipos multidisciplinares, argumentando que desde su introducción, el Sistema Nacional de Salud “ha experimentado una mejora continua en el tratamiento de las enfermedades no transmisibles”.
Otro de los países que ha destacado la OMS a este respecto ha sido a Polonia, que en los últimos 13 años, “ha fortalecido su compromiso con la Atención Primaria de salud y la fuerza laboral de enfermería”.
Diez áreas de mejora
Analizando estos modelos de éxito, la OMS ha identificado 10 áreas para que los países se centren en mejorar el rendimiento de sus sistemas de Atención Primaria de salud. Para ello recomiendan impulsar los resultados de salud y garantizar un acceso equitativo a los servicios de salud. Esta lista se basa en el considerable volumen de evidencia y estudios de mejores prácticas de toda la Región Europea de la OMS.
De esta forma, el organismo considera que “la Atención Primaria de salud puede satisfacer más del 70 por ciento de las necesidades de salud de las personas a lo largo de su vida, desde la promoción de la salud y la prevención de enfermedades hasta el tratamiento y el tratamiento de afecciones de salud a largo plazo. Es una de las formas más inteligentes de brindar salud para todos”.
Con este objetivo, defienden la necesidad de integrar la Atención Primaria de salud y social; establecer bucles de aprendizaje para mejorar la calidad de la Atención Primaria; capacitar a los gerentes de salud para gobernar localmente y en todos los sectores; la instalaciones de actualización; y alinear la rendición de cuentas y los incentivos.