Desde a POP apuntan que para atacar el problema del tabaquismo deben promoverse estrategias integrales
26 de marzo 2024. 1:31 pm
La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) se ha sumado al resto de sociedades científicas y colectivos de salud pública y considera "urgente" la puesta en marcha del Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo del Ministerio de Sanidad 2024-2027 para poner solución al…
La Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) se ha sumado al resto de sociedades científicas y colectivos de salud pública y considera 'urgente' la puesta en marcha del Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo del Ministerio de Sanidad 2024-2027 para poner solución al 'grave' problema del tabaquismo.
Así lo ha manifestado la presidenta de la POP, Carina Escobar, quien ha remarcado que 'la prevención del consumo de tabaco es esencial para salvaguardar la salud pública. El problema del tabaquismo no solo constituye una grave amenaza para la salud general de la población, sino que también agrava los síntomas y deteriora la calidad de vida de las personas con necesidades crónicas de salud'.
El nuevo Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2024-2027, pretende, entre otras mejoras, que los jóvenes no empiecen a fumar, que aumente el número de exfumadores adultos y que haya más espacios libres de humo para prevenir el humo de segunda generación. En este punto, desde la Plataforma de Organizaciones de Pacientes, abogan por el consenso entre el Ministerio y las consejerías de Sanidad.
El problema del tabaquismo
Desde a POP apuntan que para atacar el problema del tabaquismo deben promoverse estrategias integrales que aborden tanto el tabaquismo tradicional como las nuevas formas de consumo de nicotina. 'Esto implica no solo campañas de concienciación y educación pública, sino también políticas efectivas de control de tabaco que regulen la publicidad promuevan espacios libres de humo y aumenten los impuestos sobre los productos de tabaco', ha explicado Escobar.
Otro punto a tener en cuenta es el aumento de la carga sobre el sistema de salud del tabaco, contribuyendo significativamente al gasto sanitario español y poniendo en riesgo su sostenibilidad. 'Reducir el consumo de tabaco no solo disminuye la incidencia de enfermedades relacionadas con el mismo, sino que también alivia la presión sobre los recursos humanos y financieros”, concluyen desde la POP.