Lo primero que hay que hacer para controlar el colesterol es calcular el riesgo cardiovascular. En España se aconseja utilizar la tabla de riesgo SCORE actualizada en forma de SCORE2 y para ancianos, SCORE2OP.
El objetivo es reducir el cLDL, alcanzar el normopeso y mejorar la capacidad cardiorrespiratoria. Para ello, se debe disminuir la ingesta calórica y aumentar el gasto energético en aquellas personas con exceso de peso o adiposidad abdominal. A esto hay que añadir el ejercicio físico regular con una intensidad moderada durante al menos 30 min/día, incluso si no existe sobrepeso.
Hay que evitar el consumo de grasas trans, aceites tropicales, carnes grasas o procesadas, dulces, crema, y aumentar el de ácidos grasos monoinsaturados, aceite de oliva virgen extra, así como los poliinsaturados, aceites vegetales no tropicales.
Las frutas, verduras y hortalizas (4-5 raciones al día), legumbres (3 veces a la semana), frutos secos (30 g 5-7 veces a la semana, de preferencia nueces), alimentos con cereales (4-5 raciones al día, de las cuales al menos 3 deben ser integrales), pescado o marisco (al menos 3 veces a la semana, de todo tipo aunque de preferencia azul), carne blanca o magra (3-4 raciones a la semana) deben estar presentes en la dieta. También se aconseja reducir el consumo de azúcar añadida a < 10% de la energía total y el de sal a < 5g/día y el abandono de tabaco a los fumadores.
El manejo de la dislipemia es multidisciplinar, basado en el cambio en el estilo de vida
Los cambios dietéticos y en el estilo de vida son la base del tratamiento de la dislipemia. Es necesario estratificar el riesgo para poder establecer los objetivos de control del cLDL.
Clara Simon
22 de noviembre 2023. 9:52 am