Redacción, Madrid.- En España existen más de 800.000 portadores del virus de la hepatitis C, y de ellos más de la mitad no saben que padecen la enfermedad y no reciben tratamiento. Además, con frecuencia la infección transcurre sin síntomas, lo que dificulta su diagnóstico. Por eso la celebración este viernes del Día Nacional de la Hepatitis C tiene como objetivo sensibilizar e informar a la población sobre la enfermedad, transmitir la necesidad de controlar los factores de riesgo de contagio y contribuir a un mayor diagnóstico de los portadores del virus que desconocen que lo son. Esta jornada, bajo el lema "Por un diagnóstico a tiempo", ha sido promovida por la Asociación Española para el Estudio del Hígado (AEEH).
Esta iniciativa espera convertirse en una llamada de atención para que los médicos "reconozcan la enfermedad lo antes posible y para que las autoridades sanitarias adopten políticas de prevención y contribuyan a la erradicación de la enfermedad aplicando medidas que reduzcan la difusión del virus", explica el doctor Miguel Bruguera, coordinador del Día Nacional de la Hepatitis C y médico del Servicio de Hepatología del Hospital Clínic de Barcelona.
Será, también, un día para recordar que la hepatitis C es una enfermedad más común de lo que se cree "pero que se puede tratar, y sólo si no se maneja adecuadamente puede dar lugar a complicaciones", afirma el experto.
Para Amparo González, presidenta de la Asociación Española de Enfermos de Hepatitis C, este día representa una oportunidad única para que la sociedad en general conozca qué es la hepatitis C "y el paciente no viva en silencio con su enfermedad. Uno de los grandes desafíos "matiza- es el gran desconocimiento y la desinformación que existe en torno a la enfermedad. El enfermo diagnosticado -señala- no recibe una información adecuada y tiene miedo a contagiar a sus familiares y a las consecuencias de la enfermedad por lo que se precisa más información".
Riesgo en piercings y tatuajes
En opinión del coordinador del Día Nacional de la Hepatitis C, en este momento se hace imprescindible mejorar el diagnóstico de la enfermedad. "Debe mejorarse la información de esta enfermedad a los profesionales médicos y es fundamental concienciar a la población de los riesgos asociados a tatuajes, piercings y acupuntura, principales factores de riesgo junto con las relaciones sexuales, la transmisión por transfusiones de sangre o de hemoderivados, y trasplantes y hemodiálisis", señaló.
Asimismo, ciertos tratamientos de belleza y cuidados higiénico-sanitarios (inyecciones subcutáneas, esclerosis de varices, manicura, pedicura, etc.) pueden suponer un riesgo añadido, advierte el doctor. Es, por ello, aconsejable extremar las precauciones con la utilización de guantes, evitando compartir los utensilios o los viales de inoculación y haciendo uso siempre de material desechable", precisa el doctor Moreno.
Avances en tratamiento
Por ahora, no existe una vacuna para prevenir la infección por el virus de la hepatitis C -comenta el doctor Ricardo Moreno, del Servicio de Patología Digestiva del Hospital La Princesa de Madrid-, pero este aspecto negativo se contrarresta parcialmente por el hecho de haberse conseguido un gran avance en el tratamiento: "Disponemos de fármacos eficaces, se han definido las pautas terapéuticas en reuniones de consenso internacionales y, por último, se conocen los efectos secundarios del tratamiento y la mejor manera de prevenirlos o atenuarlos".