Redacción.- La mayoría de los trasplantes de riñón tienen su origen en donantes de edad avanzada que fallecen a causa de una enfermedad cerebrovascular. Desde hace una década, el perfil del donante se ha ido modificando. Antes respondía al de una persona joven que fallecía a causa de un accidente de tráfico. España se encuentra a la cabeza de los países con mayor número de donantes de riñón, con más de2.000 trasplantes, de los cuales sólo el 5-10 por ciento fracasan al cabo de un año.
Cada vez se recurre menos a donantes de edades inferiores a 45-50 años y sin patología vascular. 'En la actualidad, en un importante número de trasplantes, el riñón procede de un donante mayor de sesenta años y se consiguen muy buenos resultados. Lógicamente también estos órganos van destinados a receptores con una edad superior a 60 años', afirma el presidente de la Asociación Española de Urología (AEU), el doctor Óscar Leiva.
No obstante, si hubiera que definir un perfil idóneo de donante de riñón, éste respondería al de una persona con una edad entre 10 y 50 años, que fallece por un traumatismo craneoencefálico y sin antecedentes de enfermedad vascular. En el caso del receptor, las mejores condiciones las ofrecen un niño con un peso superior a 30 kilogramos, los adolescentes y adultos hasta los 50 años. A partir de esta edad, lógicamente los posibles factores de riesgo aumentan.
Los trasplantes de riñón son los más frecuentes, con una tasa de supervivencia del paciente al año de haber recibido el órgano del 95-100 por cien; la supervivencia del injerto se sitúa entorno a más del 90 por cien al cabo de tres años y del 70-75 por cien pasados 10 años. En los últimos años se ha conseguido en España un equilibrio entre el número de donantes y el de receptores. En lo que a donación de órganos se refiere, nuestro país continúa a la cabeza de los países de su entorno. En 1999 el porcentaje de donaciones de órganos de cadáver ha sido de un 33 por millón de población (pmp), que es la tasa más alta del mundo. Los órganos procedentes de donantes vivos son bastantes escasos concretamente en España se sitúa en el 1 por ciento mientras que, por ejemplo, en los países nórdicos, donde la donación de cadáver es más baja, se alcanza el 15 por ciento..
Como indica el doctor Leiva, los órganos procedentes de donante vivo siguen siendo todavía muy escasos en España, entre otras causas por el programa tan activo de donación de cadáver. Continúa Leiva que 'en el Hospital 12 de Octubre de Madrid, de los 2.000 trasplantes realizados por el Grupo de Urología, sólo 48 de ellos procedían de donantes vivos emparentados. No obstante, la tendencia actual es un aumento del número de trasplantes procedentes de donante vivo desde que se utiliza la técnica laparoscópica para extraer el órgano. De cualquier forma, es necesario que se incremente la donación de cadáver para evitar la otra opción'.
Si bien no hay grandes diferencias en cuanto al número de trasplantes e indicaciones entre los países europeos, sí varía el profesional sanitario responsable de la intervención. 'En España', comenta el presidente de la AEU, 'desde el año 1965, en que empieza a realizarse este tipo de trasplante, esta labor la realiza con exclusividad el Servicio de Urología del centro hospitalario'.