Un polémico experto de EEUU en técnicas de fertilidad aseguró hoy en Londres que ha implantado un embrión humano clonado en el útero de una mujer, anuncio que fue condenado por el Gobierno, grupos pro vida y científicos del Reino Unido, informa el diario ABC en su edición del sábado, 17 de enero.
En una rueda de prensa en un céntrico hotel londinense, el doctor Panos Zavos, responsable del Instituto de Andrología de Estados Unidos, reveló que la 'madre de alquiler' tiene 35 años y el implante se produjo hace dos semanas en un lugar que no se halla ni en su país, ni en Gran Bretaña ni en la Europa continental.
Sin aportar prueba alguna, el científico explicó que la mujer, cuya identidad o nacionalidad se han mantenido en secreto, padecía una menopausia precoz y su marido no puede producir esperma, por lo que la pareja resultaba apropiada para un tratamiento de fertilidad.
Zavos se declaró 'muy optimista' ante los resultados del experimento, aunque también 'muy realista sobre el hecho de que podemos fracasar', dado que sólo existe una probabilidad del 30 por ciento de que el implante dé lugar a una embarazo normal.
'No puedo anunciar un embarazo. Hay que esperar dos o tres semanas hasta que sepamos algo más', recalcó el médico, que hace causa común con el andrólogo italiano Severino Antinori, conocido por su reiterada disposición a clonar un ser humano.
El doctor creó el embrión al extraer el ADN de una célula cutánea del marido de la 'madre de alquiler' y trasplantarlo a un óvulo de la mujer, al que se le extrajo su núcleo y, por tanto, la mayor parte de su material genético. Este procedimiento de clonación para fines reproductivos se basa en la misma técnica que se utilizó para dar vida a la ya fallecida
oveja Dolly, el primer mamífero clonado, aunque su aplicación a los
humanos es ilegal en este país.
El anuncio del médico desató una oleada de críticas que cuestionaron la veracidad del experimento y subrayaron la necesidad de respetar unos valores éticos en el delicado caso de la clonación humana.
'El ministro británico de Sanidad, John Reid, tildó el experimento de 'grave abuso de la ciencia genética', al recordar que 'es ilegal clonar un niño en Reino Unido', uno de los 'pocos países del mundo que ha aprobado una ley para prohibir esa posibilidad'.
De igual manera, el portavoz del grupo defensor de la vida LIFE, Patrick Cusworth, acogió el anuncio con 'escepticismo' y denunció la iniciativa del doctor Zavos ha expuesto a una mujer a 'un riesgo cercano al suicidio por sus propias razones egoístas y económicas'.
El portavoz de la 'Royal Society' (Academia Británica de las Ciencias), Bob Ward, calificó de 'circo' la rueda de prensa convocada en Londres y se pronunció, 'como la mayoría de los médicos y científicos, muy escéptico con las alegaciones hechas hoy'. También se sumó a las críticas la Sociedad de Fertilidad Británica, que advirtió de que 'dar credibilidad infundada' a un experimento 'peligroso y no ético' representaría una actitud 'irresponsable'.
El experto norteamericano también aprovechó su comparecencia ante los medios informativos para desvelar sus controvertidos planes para crear 'bebés de repuesto'. Esa iniciativa se concreta en la división de embriones clonados en dos partes: una a la que se permitiría el desarrollo hasta convertirse en niño, y otra que se guardaría como 'repuesto'.
Según el experto, ese embrión de recambio podría usarse, bien como suministrador de tejidos y órganos para 'usos terapéuticos' en caso de enfermedad de su hermano, bien como futuro niño que podría ayudar a las parejas que no son fértiles. Ese método de división embrionaria también es ilegal en el Reino Unido si no se dispone de la licencia oportuna, que concede la Autoridad de Fertilización Humana y Embriología (HFEA, en sus siglas inglesas).