Prestigiosos institutos de investigaciones médicas de distintos países y la ONG Médicos sin Fronteras(MSF) han constituido en Ginebra una nueva organización para desarrollar medicinas contra las enfermedades de los países pobres, que matan a millones de personas todos los años y a las que apenas presta atención la gran industria farmacéutica, según recoge el diario EL MUNDO.
En el proyecto, impulsado por MSF, colaboran el Instituto Pasteur, de París, el Consejo Indio de Investigaciones Médicas, el Instituto de Investigaciones Médicas de Kenia, la fundación brasileña Oswaldo Cruz, el ministerio de la Salud de Malasia.
Enfermedades olvidadas
La nueva organización, denominada Iniciativa sobre Medicamentos para Enfermedades Olvidadas (DNDI), dedicará 250 millones de dólares en los próximos 12 años, de los cuales MSF aportará tres millones y el resto, los socios y organismos internacionales, para desarrollar fármacos contra la enfermedad del sueño, la leishmaniasis y la enfermedad de Chagas, que amenazan a 250 millones de personas cada año.
De los 1.400 nuevos medicamentos aprobados entre 1975 y 1999 solo 14 (el 10%) estaban dirigidos a combatir enfermedades tropicales, pese a que éstas representan al 90% de la morbilidad global, según datos de MSF,
Transcurrida esa primera etapa de doce años, DNDI espera haber registrado seis o siete medicinas eficaces contra enfermedades endémicas y tener en marcha otros ocho proyectos en fase de investigación y desarrollo.
Para aumentar las posibilidades de éxito a corto y medio se investigarán nuevas combinaciones de medicamentos y se recuperarán proyectos sobre fármacos abandonados por los laboratorios, una idea hacia la cual la industria "no ha mostrado mala disposición", según Rafael Vilasanjuan, secretario internacional de MSF.
Llamamiento a la comunidad científica
En la etapa preparatoria, DNDI ha identificado un número de proyectos de desarrollo de nuevas drogas que resultan prometedores y ha hecho un llamamiento a la comunidad científica en el que solicitaba cartas de interés.
"La respuesta ha sido abrumadora: se han presentado 71 ideas de posibles proyectos, lo que demuestra que hay un terreno ahí sin explotar", ha manifestado el doctor Yves Champey, director provisional de la nueva organización.
"Lo que falta es la estructura para canalizar esas ideas prometedoras hasta su completa realización, y éso es lo que proporciona nuestra iniciativa, que utilizará la capacidad y la experiencia farmacológica existentes en los países afectados", agregó.
DNDI será la primera organización no lucrativa centrada exclusivamente en las enfermedades que hacen estragos sobre todo en el mundo en desarrollo y primará la necesidad de fármacos para combatirlas sobre la búsqueda del beneficio económico.
Una nueva molécula para un medicamento contra la leishmaniasis y una nueva combinación para la malaria serán los primeros proyectos de DNDI.