estudio, galardonado en las II Jornadas de Actualización del Riesgo Cardiovascular de la CAMFiC, asevera que un episodio coronario no tiene porque significar cambios drásticos en la vida de estos pacie
24 de agosto 2011. 3:58 pm
EL MEDICO INTERACTIVO, Barcelona.-Una encuesta realizada entre más de 60 pacientes infartados del CAP Jaume I de Tarragona demostró que más de la mitad de quienes sufren un infarto o una angina de pecho creen que este acontecimiento cambia radicalmente su vida. Una de las…
EL MEDICO INTERACTIVO, Barcelona.-Una encuesta realizada entre más de 60 pacientes infartados del CAP Jaume I de Tarragona demostró que más de la mitad de quienes sufren un infarto o una angina de pecho creen que este acontecimiento cambia radicalmente su vida. Una de las consecuencias de esta creencia es el empeoramiento del estado de ánimo, ya que un 39 por ciento de los pacientes dijo que se deprimía mucho.
En cuanto a las falsas creencias, uno de los ejemplos más significativos es que el 45 por ciento de los encuestados tiene miedo a realizar esfuerzos. Más positivo es el dato de que sólo el 25 por ciento de los pacientes teme mantener relaciones sexuales después de un infarto.
La doctora Sílvia Hernández 'autora del estudio junto a Carles Llor, Manel Pérez, Olga Calviño, Sílvia Crispi i Jordi Bladé- señala la importancia de 'transmitir a los enfermos la idea de que el ejercicio físico, debidamente controlado, no sólo no es peligroso, sino que puede ayudar mucho a mejorar su calidad de vida'.
Según Hernández, 'el paciente sólo ha de cambiar actitudes nocivas, como fumar. por lo demás, un episodio coronario no tiene porque significar cambios drásticos en su vida, puede continuar haciendo la mayoría de cosas que hacía antes'. 'Esto sucede por falta de información- continúa la doctora Hernández-, de aquí el importante papel de médicos y enfermeras de Atención Primaria en informar y aconsejar'.
El estudio que recoge estas conclusiones ('Encuesta de impacto emocional de calidad de vida después de sufrir un episodio coronario') consiguió el primer premio (dotado con 1.000 euros) de los galardones otorgados en la II Jornada de Actualización en Riesgo Cardiovascular organizada por la Sociedad Catalana de Medicina Familiar y Comunitaria (CAMFiC), con la colaboración de Novartis.