E.P.-La mitad de las urgencias médicas infantiles se deben a trastornos respiratorios agudos, según afirmó recientemente un especialista en neumología pediátrica del hospital infantil Niño Jesús de Madrid y miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR), el doctor Sequeiros González.
A su juicio, el problema consiste muchas veces en el denominado ‘falso crup’, de características benignas, aunque en otras ocasiones se trata de una epliglotitis, es decir, una inflamación progresiva de los pliegues artineopiglóticos y aritenoides, que actúa como una lámina cartilaginosa en la parte posterior de la lengua tapando la laringe al tragar.
Esta afección produce una obstrucción que puede ser completa de la vía aérea constituyendo siempre una verdadera "emergencia pediátrica". Por ello, considera que esta patología tendría que considerarse como una urgencia en el tiempo, diagnóstico y tratamiento.
Esta infección está causada casi siempre por la bacteria Haemophilus influenzae, tipo B, y se presenta fundamentalmente en niños de 2 a 6 años de edad. Cuando eso sucede, la epiglotis inflamada obstruye rápida y progresivamente la vía aérea, pudiendo causar la muerte del niño por asfixia si no se actúa rápidamente.
Según la SEPAR, cuando el médico tiene la certeza de que el pequeño paciente se halla afectado de una epiglotitis, se debe evitar el decúbito supino y lo primero es tomar en la mayor brevedad posible medidas encaminadas a permeabilizar la vía aérea. Lo más adecuado para ello es realizar una fibroncoscopia nasotraqueal bajo anestesia general e intubación para conseguir una buena ventilación y proceder al ingreso del niño en Cuidados Intensivos, o bien realizar una traqueotomía si resulta difícil intubar al niño en estas circunstancias.
Además, independientemente del diagnóstico, se deber realizar una radiografía lateral del cuello con objeto de excluir otras patologías, como la aspiración de un cuerpo extraño. El tratamiento debe completarse siempre con antibióticos, según este experto, y es esencial también mantener al niño bien oxigenado.
La SEPAR también subraya que la vacuna frente al Haemophilus Influenzae ha venido a disminuir notablemente la cadena de transmisión que adquieren los menores en las guarderías. Por otro lado, apunta que el falso crup, aunque no es de la misma gravedad, también requiere asistencia urgente.