Redacción, Barcelona.- Las mujeres fumadoras que no dejan el hábito del tabaco presentan peores resultados en la gestación, además de tener un mayor riesgo de dar a luz prematuramente y de tener neonatos de bajo peso. Por esta razón, "ayudarlas a dejar de fumar es una prioridad sanitaria, especialmente, durante el embarazo, y también después, dado que algunos estudios muestran que el 36 por ciento de las embarazadas que habían dejado el tabaco, vuelven a fumar después de dar a luz.
Así se desprende de un estudio de la Agencia de Salud Pública de Barcelona sobre los factores asociados al tabaquismo durante el embarazo y su abandono, el cual llega a la conclusión de que de las mujeres embarazada fumadoras, 41 por ciento, sólo el 24.5 por ciento lo siguen siendo hasta el final de la gestación, mientras que el resto deja de fumar.
Algunos de los resultados, que van a ser presentados en el IV Congreso Nacional de Prevención y Tratamiento del Tabaquismo que se celebra estos días en Barcelona, indican que tienen mayor posibilidad de abandonar el hábito tabáquico las mujeres primíparas, las que han planificado su embarazo y las que dan a luz en centros privados, aunque si estas gestantes tienen pareja fumadora, dejar de fumar les resulta más dificultoso.
Otras de las conclusiones apuntan a que las jóvenes son las que llegan a la gestación siendo más fumadoras, las mujeres universitarias fuman menos, igual que las que tienen ocupaciones no manuales. Asimismo, tienden a fumar más las féminas que también tienen pareja fumadora. También se comprueba que las mujeres españolas fuman más que las inmigrantes.
El estudio se ha realizado sobre una muestra de 2.365 mujeres de Barcelona que dieron a luz un hijo sin defectos congénitos entre 1997 y 2003. Las variables analizadas incluyen edad materna, paridad y algunas relacionadas con el nivel socioeconómico.