Han pasado ya más de cinco años desde que se hicieron efectivas las transferencias en materia sanitaria, que entraron plenamente en vigor el 1 de enero de 2002. Con ellas, las comunidades autónomas pudieron dar un cambio de rumbo a su gestión con la descentralización en materia sanitaria. Es ahora el momento de plantearse nuevos retos y objetivos, y todos pasan por conseguir un Sistema Nacional de Salud más fuerte y cohesionado, en el que los ayuntamientos y comunidades autónomas desempeñan un importante papel.
A tan sólo unos días de las elecciones, EL MEDICO INTERACTIVO, ha pulsado la opinión de los tres principales partidos políticos nacionales.
Para el Partido Socialista, el futuro pasa por conseguir un Sistema Nacional de Salud más fuerte y moderno, basado en una concepción integral de la salud con una doble vertiente: promoción de la salud y la prevención de enfermedades, junto con la consideración de los ciudadanos como sujetos activos y participativos, y el ámbito local como eje fundamental.
El Partido Popular, por su parte, apuesta por 'humanizar la Sanidad', a través de una serie de medidas enfocadas a mejorar la calidad asistencial y también las condiciones de los profesionales sanitarios. En este sentido, el uso de las nuevas tecnologías se erige como eje fundamental. La recuperación de la cohesión del SNS es también uno de los objetivos prioritarios de la formación.
Por último, Izquierda Unida se posiciona a favor de un mayor protagonismo de las Administraciones locales y de la creación de una red sanitaria pública única que permita planificar y optimizar los recursos y mejorar la equidad de acceso, y en el que debe desempeñar un papel fundamental la participación de los ciudadanos.
Segundas elecciones
tras las transferencias sanitarias
A juicio del Partido Socialista, actual partido responsable del Gobierno central, el traspaso de competencias sanitarias ha conseguido un sistema sanitario nacional más igualitario y cohesionado, 'mejorando la accesibilidad y la cercanía de los ciudadanos a sus respectivos servicios de salud, facilitando la adaptación a las necesidades de salud de los pacientes y permitiendo una mayor agilidad a la hora de tomar decisiones'. Son palabras de Matilde Valentín, secretaria general de Bienestar Social del PSOE, quien incide también en que la descentralización ha reducido distancias entre comunidades autónomas. Para el Partido Socialista, el Sistema Nacional de Salud es uno de los pilares del estado del bienestar, y su descentralización 'ha acercado a los hombres y mujeres de España este servicio público esencial'. En opinión de la secretaria de Bienestar Social, la gestión descentralizada 'exige lealtad constitucional y diseña un nuevo marco de cooperación entre el Gobierno central, las comunidades autónomas y los ayuntamientos'.
Las tres principales formaciones políticas, PSOE, PP e IU, prestan especial atención a las políticas sanitarias y de bienestar social, de cara a los próximos cuatro años
No es ni muchos menos tan optimista el Partido Popular, formación bajo cuyo mandato de materializó el traspaso de competencias. Su secretario de Política Social y Bienestar, Julio Sánchez Fierro, cree que a partir del año 2004 estas dotaciones han ido a peor, y que es necesario avanzar en las asignaturas pendientes para que el balance pueda ser positivo. Para el PP, se ha perdido el espíritu que animó el traspaso de competencias (efectivas desde el 1 de enero de 2002), y, además, no se han desarrollado los instrumentos y leyes para asegurar su cohesión y calidad. Su principal reto, en este sentido, es el de 'recuperar la cohesión del Sistema Nacional de Salud, con la máxima colaboración de las comunidades autónomas'.
La tercera fuerza política a nivel nacional, Izquierda Unida, aunque muestra su apoyo a la descentralización, considera que 'queda mucho por hacer'. Así, su coordinador ejecutivo de Política Institucional, Félix Taberna, incide en este aspecto y señala que siempre han defendido esta descentralización aunque, a juicio de la formación, el debate se ha quedado 'sistemáticamente estancado' por las reformas estatutarias. Desde IU abogan por una segunda descentralización, la municipal, que consideran prioritaria, y señalan que no es incompatible con el desarrollo del autogobierno de las CC.AA., sino complementario.
Las tres formaciones prestarán especial atención a las políticas sanitarias y de bienestar social, de cara los próximos cuatro años en las autonomías y ayuntamientos, teniendo en cuenta que no se puede generalizar con respecto a las características de las comunidades y municipios.
La apuesta sanitaria del PSOE
El Partido Socialista incide en su Programa Marco en que el SNS tiene que ir más allá de lo meramente asistencial, y profundizar en la prevención y promoción de la salud. Señalan que el Sistema Nacional de Salud ha de tener suficiencia financiera adecuada a las necesidades que demanda un servicio de salud de calidad, en constante evolución tecnológica y con eficiencia de los profesionales que la atienden. Recalcan también en su programa que no hay que olvidar que el SNS constituye 'una potente herramienta redistributiva desde el punto de vista económico y social', incidiendo en que la evolución de la sociedad, el incremento de la población y el aumento de la esperanza de vida han hecho que aparezcan nuevas realidades sociales y nuevos retos. Esta nueva realidad exige 'la profundización, redefinición y orientación de las políticas sanitarias en el conjunto del SNS para que siga siendo un referente de calidad en los modelos sanitarios de Europa'.
Matilde Valentín, en declaraciones a EL MEDICO INTERACTIVO, recalca el especial interés de los socialistas en la promoción y la prevención de la salud. 'Además de desarrollar políticas sanitarias asistenciales, otorgamos especial relevancia a que los medios y actuaciones del sistema sanitario estén también orientados a la promoción de la salud y a la prevención de las enfermedades'. 'Ello supone 'continúa la responsable de bienestar social' una concepción integral de la salud, por la cual los servicios de salud han de incorporar las acciones de promoción de la salud y de prevención de las enfermedades de la misma forma que las asistenciales, las curativas, las rehabilitadoras o las de cuidados paliativos'.
Esta nueva concepción de la Sanidad y esta nueva realidad social conllevan también un cambio en el panorama financiero. Según se recoge en el Manifiesto Autonómico del PSOE, se han incorporado al conjunto del sistema sanitario 3.000 millones de euros, en virtud del acuerdo adoptado en la Conferencia de Presidentes de 2005. Asimismo, se aprobó el Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud, con una dotación de 65 millones de euros, según el Programa Marco del PSOE.
Desde el Partido en el Gobierno se destaca también la prioridad en las políticas sociales, subrayando el aumento 'en más de un 50 por ciento en gasto social en los dos últimos años', y se destaca la puesta en marcha, dentro de las políticas sociales, de la Ley de Promoción de Autonomía Personal y de Atención a las personas en Situación de Dependencia.
Otras medidas desarrolladas en los últimos años han sido la Ley del Tabaco, la puesta en marcha de la Estrategia sobre Nutrición, Actividad Física y Prevención de la Obesidad (NAOS), o el Plan Estratégico de Política Farmacéutica.
El ámbito local como eje esencial
Para los responsables del PSOE, desde los Gobiernos locales se ha de asumir el compromiso de implantar políticas que hagan efectivo el derecho a la protección de la salud en aquellos campos donde las competencias así lo obliguen, y en aquellos otros en los que no se tengan competencias, pueden actuar como herramienta de colaboración en la mejora de la salud de la población. Los socialistas consideran el ámbito local como un eje esencial, con un nuevo modelo que concibe la salud en su sentido más amplio, aunando asistencia y prevención.
Esta idea general de concebir la salud con una intervención preventiva de los poderes públicos frente al modelo clásico basado en la función asistencial descuidándose la función preventiva, se articula en torno a varias medidas, como son: la elaboración de planes de salud municipales para identificar los problemas de salud del municipio, una especial atención a la educación sanitaria y la promoción de la salud, impulso de políticas de prevención de riesgos del entorno, máxima eficacia en las políticas municipales de control, el desarrollo de instrumentos y políticas eficaces y participativas en la gestión municipal.
Sus propuestas también incluyen la promoción del Programa de la OMS de 'Ciudades Saludables', que representa, según explica Valentín, el marco idóneo para albergar el conjunto de políticas locales, 'que se dirigen hacia un objetivo común: hacer de la ciudad un espacio habitable, que permita el desarrollo de los ciudadanos, de la salud y la convivencia, de la economía y la cultura, del bienestar físico, emocional y social' Por lo tanto, señala la responsable socialista, 'las políticas locales habrán de tener un desarrollo coordinado y transversal de modo que sirvan para potenciar e impulsar las medidas autónomas y estatales'.
Impulso a la Atención Primaria
A nadie se le escapa que la Atención Primaria es uno de los pilares del sistema sanitario, y también una de las principales inquietudes de los ciudadanos. Según señala la secretaria de Bienestar Social del PSOE, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en su discurso de investidura, 'ya plasmó la necesidad de impulsar la Atención Primaria y el compromiso de mejorar su capacidad de resolución y sus recursos, como una de las líneas básicas para aumentar la calidad y la eficiencia del sistema'. El Ministerio de Sanidad y Consumo, en colaboración con las CC.AA. y las Sociedades Científicas, ha estado trabajando en la Estrategia de A.P. del siglo XXI, que se presentó el pasado mes de diciembre. 'Todos coincidieron en la necesidad de dar un nuevo impulso al primer nivel asistencial para reforzar su papel decisivo, como lugar de entrada del paciente al sistema sanitario y servicio en el que se atienden y resuelven la mayor parte de sus problemas de salud'. Valentín recuerda también que 'en la II Conferencia de Presidentes se constató la necesidad de incrementar los presupuestos dedicados a Atención Primaria al incluir entre las medidas aprobadas de racionalización del gasto sanitario 'aumentar los recursos y la capacidad de resolución en el primer nivel asistencial'.
Ciudadanos activos y participativos
Matilde Valentín resume las iniciativas socialistas afirmando que hay que considerar a los ciudadanos como sujetos activos y participativos, 'que exigen sus derechos y deberes en materia sanitaria y, a la vez, requieren respuestas más allá de las declaraciones formales. Demandan información, transparencia en las decisiones, participación en el sistema sanitario y en las relaciones médico-paciente, y, sobre todo, calidad en los servicios'. Valentín subraya que los socialistas trabajan para lograr una mejora continua del sistema sanitario público, 'que se traduzca en mayores niveles de salud de la población, reforzando simultáneamente la calidad, la seguridad, la efectividad, la cohesión y la equidad. Todo nuestro trabajo, toda la planificación y toda la gestión van orientadas a mejorar la salud de los ciudadanos'. Valentín añade, por último, que su objetivo es garantizar que no se debilite el Sistema Nacional de Salud, 'que tanto esfuerzo nos costó poner en pie entre todos: no podemos olvidar que la Sanidad forma parte de nuestras prioridades y que su fortalecimiento contribuirá a mejorar la calidad de vida de todos los ciudadanos', concluye.
Los retos del PP en materia sanitaria
El Partido Popular, principal partido de la oposición, se propone como principales retos 'humanizar la Sanidad' y también 'recuperar la cohesión del Sistema Nacional de Salud' que a su juicio, se ha perdido.
Su secretario de Política Social y Bienestar, Julio Sánchez Fierro, se muestra, en declaraciones a El MEdico, muy crítico con la gestión del Gobierno socialista, ya que, en su opinión, ha habido muchas dificultades por parte de las CC.AA. con el Ministerio de Sanidad para poder avanzar en la gestión de la Sanidad, desde que el PSOE accedió al poder. 'Ha habido falta de sintonía. Las comunidades gobernadas por el Partido Popular han ido por delante del Gobierno y, desde una visión autonómica, éstas han vivido un período bastante negativo, ya que el Ejecutivo no ha ejercido la función de liderazgo y de impulso que le corresponde desde el punto de vista político, subraya Sánchez Fierro. El Partido Popular recoge en su programa la necesidad de incrementar la cohesión y vertebración del SNS, garantizando la efectiva igualdad de derechos y obligaciones entre todos los españoles.
Concretamente, desde el PP se recrimina al Gobierno que no se hayan respetado los instrumentos 'políticos, jurídicos y financieros' habilitados para mantener cohesionado al Sistema Nacional de Salud, y enumeran varios puntos con claras divergencias con el Gobierno socialista. Según señala Sánchez Fierro, el Partido Popular no ha sido escuchado en el Consejo Interterritorial en varios ejes: financiación de la Sanidad, recursos humanos, política farmacéutica y política de salud pública.
En lo relativo a la financiación de la Sanidad, hay que entender, destaca el PP, que la población en España ha aumentado en 4 millones de personas, muchos de ellos inmigrantes, 'pero la financiación y el número de médicos se mantiene a niveles de 1999, por lo se produce una pérdida de calidad asistencial'.
Igualmente, se muestra crítico con los recursos humanos destinados al SNS. 'Existen muchas necesidades e insuficiencias en materia de recursos humanos', comenta. 'Hay muchos profesionales que se tienen que ir fuera de España, por falta de oportunidades, y esas deficiencias de medios se suplen por profesionales del extranjero. Es triste que nuestros médicos tengan que buscar oportunidades fuera y que la inversión en la formación sea aprovechada por otros países', apostilla. La política farmacéutica y el tema de la salud pública también preocupan y han hecho que las comunidades autónomas gobernadas por el PP no vayan de la mano del Gobierno central. Todas estas divergencias han dado como resultado, según Sánchez Fierro, una 'frustración importante en cuanto a la labor de liderazgo e, incluso, en algunos casos, hostilidad para poder cumplir la labor de coordinación'. Inciden también en la, a su entender, mal dotada cartera de servicios, y ponen de manifiesto unos datos extraídos del barómetro sanitario que mostraban una disminución de la confianza en la Sanidad pública. Concretamente, y siempre según esa encuesta, en los últimos cuatro años los ciudadanos que prefieren ser atendidos en un centro sanitario público ha bajado un 10 por ciento, mientras que los partidarios de los servicios privados aumentan un 25 por ciento.
Propuestas para 'humanizar
la Sanidad'
Al margen de las críticas, el Partido Popular centra su campaña en el objetivo de 'humanizar la Sanidad', dotándola de los recursos necesarios, porque los usuarios del sistema 'son los que dan sentido al propio sistema'. Para el PP, es fundamental, para una buena calidad en la atención sanitaria, una especial atención a los profesionales sanitarios, para que tengan oportunidades en España, retribuciones dignas y una carrera profesional que reconozca sus méritos y premie el esfuerzo en los ámbitos académicos y de investigación.
En el Programa municipal y autonómico, el Partido Popular concede una especial importancia al uso de las nuevas tecnologías de cara a realzar la dimensión humana de la Sanidad. Así, consideran éstas como herramienta para agilizar y mejorar la atención pública sanitaria. Dos ejemplos: en cuanto a la consulta médica, proponen simplificar los trámites en la receta de medicamentos y agilizar la petición de cita médica, a través de la tarjeta sanitaria electrónica, la receta médica electrónica, cita por internet y la telemedicina. En lo que respecta a las listas de espera, proponen mejorar la comunicación al enfermo, atenuando su incertidumbre e incrementando la transparencia, a través de poner al paciente en espera por internet, con fecha aproximada de intervención, garantizando la confidencialidad.
En su Programa Marco para las elecciones municipales y autonómicas desgranan las principales propuestas. Destacan las siguientes: garantizar el acceso rápido de los servicios de urgencias, con un máximo de 30 minutos, asistido por ambulancias y helicópteros de transporte controlado. impulso de un plan de salud buco-dental, especialmente para mayores de 65 años y menores de 15. planes integrales con atención prioritaria a las cardiopatías, cáncer y enfermedades neurodegenerativas, así como planes especiales para las enfermedades emergentes y enfermedades raras.
Otras propuestas son: implantar una atención integral en la salud mental que mejore los cuidados asistenciales, reforzar la asistencia socio-sanitaria para los pacientes con enfermedades crónicas, la incorporación al sistema de salud de nuevas estrategias de prevención, creación de nuevos centros de especialidades con horarios de mañana y tarde, la ampliación de los programas de detección precoz de cáncer de mama y de cérvix, el fomento de la investigación biomédica y la utilización de las biotecnologías, y promover la regulación de las medicinas alternativas. La educación sanitaria y la promoción de hábitos saludables también son ejes importantes en el programa del partido.
Desde el PP, como reseña su secretario de Política Social y Bienestar, se insiste por último en el reforzamiento del Sistema Nacional de Salud: 'Está bien que cada una de las comunidades autónomas quiera conseguir el mejor nivel asistencial, pero no podemos olvidar que los ciudadanos españoles con la base del SNS, la calidad y la cohesión del sistema éste no debe ser un mero objetivo teórico sino un derecho jurídico, en el que el Ministerio de Sanidad debería ser su principal promotor', señala Sánchez Fierro, quien añade también que el 25 por ciento de los presupuestos debería dedicarse a la promoción de la salud y la prevención.
IU, hacia una red sanitaria pública única
Desde Izquierda Unida se mantiene el compromiso por una red sanitaria pública única, en el que debe desempeñar un papel fundamental la participación de los ciudadanos y de los ayuntamientos. Como recogen en su programa, el ayuntamiento debe convertirse en portavoz de las necesidades de salud de su población ante el Sistema de Salud con el fin de que cada municipio tenga una infraestructura sanitaria suficiente. Sebastián Taberna, coordinador ejecutivo de Política Institucional de Izquierda Unida, entiende que 'únicamente el sistema público puede garantizar la gratuidad, equidad y solidaridad. Por ese motivo, en IU reivindicamos el papel de los ayuntamientos en materia de control de salud medioambiental, consumo y demás cometidos que establece la Ley General de Sanidad. Además, apostamos por una Red Sanitaria Pública Única que garantice una atención de salud para todos los habitantes del municipio por el sistema público'. Desde esta formación se demanda, además, una estructura municipal, integrada dentro de la Red Sanitaria Pública Única, con medios y personal suficientes para desarrollar una labor inspectora y de control de las competencias municipales en diferentes aspectos.
Esta organización política concreta estas medidas reivindicando las siguientes estructuras y servicio básicos: un centro de salud en cada zona básica de salud (5.000 a 25.000 habitantes), con los recursos humanos y materiales suficientes, con lo que se garantizaría al menos 1.500 pacientes por médico general y 800 niños por pediatra. o desarrollo de la telemedicina, para ofrecer un servicio de mayor calidad, eficiencia y accesibillidad, superando las barreras geográficas y las limitaciones de la práctica médica. En este sentido, Taberna señala que la telemedicina 'es un servicio básico para facilitar e incrementar la eficiencia y accesibilidad al sistema sanitario, en particular en aquellos municipios más pequeños o más alejados de grandes núcleos urbanos. Apostamos por la potenciación de una Red Sanitaria Virtual que, sin sustituir la relación médico-paciente, facilite la celeridad en el intercambio de datos con otros profesionales, el diagnóstico más rápido y, por tanto, una mejora en la calidad asistencial'.
Izquierda Unida completa sus programa proponiendo una organización adecuada en la atención de urgencias y emergencias durante las 24 horas. dispensación gratuita de la píldora postcoital allí donde gobierne IU. equipos de asistencia especializada públicos y accesibles para toda la población y con instalaciones suficientes en cantidad y calidad. servicio de Geriatría en cada área de salud, y cobertura adecuada a las necesidades de salud mental en los municipios. Desde Izquierda Unida, se presta también especial atención al proyecto de la Ciudades Saludables, abre un debate en torno a las drogas, proponiendo un tratamiento sanitario adecuado, y contempla una estrategia global en torno al VIH-sida.
El PSOE recoge en su programa que el SNS ha de tener suficiencia financiera adecuada a las necesidades que demanda un servicio de salud de calidad
Esta organización política ve necesaria también una 'segunda descentralización' de la Sanidad, ir más allá en las transferencias sanitarias. 'Nunca se ha considerado una segunda descentralización, la municipal, que estimamos prioritaria. Esa segunda descentralización no es incompatible con el desarrollo del autogobierno de las CC.AA., al contrario, puede y debe ser complementaria. Izquierda Unida, como fuerza política de marcado carácter municipalista, debe enarbolar la bandera del poder local, bandera que ha sido abandonada tanto por los partidos mayoritarios como por los nacionalistas', apunta Sebastián Taberna.
El PP propone como primeros retos humanizar la Sanidad y recuperar la cohesión del Sistema Nacional de Salud
Atención Primaria equitativa, a
ccesible, resolutiva y de calidad
La Atención Primaria constituye el primer contacto del individuo con el sistema sanitario. desde IU se quiere brindar atención integral al individuo y a la comunidad desarrollando funciones de promoción, prevención, asistencia y recuperación de la Atención Primaria. Y para llevar esto a cabo debemos prestar una gran importancia a todos los profesionales que se ocupan de desempeñar esta gran labor.
Desde Izquierda Unida se mantiene el compromiso por una red sanitaria pública única, con una participación más activa de los ciudadanos
IU, en palabras de su coordinador ejecutivo de Política Institucional, cree en una Atención Primaria equitativa, accesible, resolutiva y de calidad, 'que es el eje de un buen sistema sanitario'. Para ello, prosigue, se necesitan más recursos para los centros de salud y mejores condiciones para los profesionales, y es necesario que los médicos tengan más capacidad resolutiva y puedan dedicar más tiempo a sus pacientes (al menos 10 minutos por visita) así como ahondar en la prevención, la formación, la docencia y la investigación. 'Hay que disminuir drásticamente la burocracia, erradicar los contratos basura y evitar la fuga de profesionales', señala este responsable de IU.
Ayuntamientos fuertes
y con mayor capacidad de decisión
El principal reto de Izquierda Unida de cara a los próximos cuatro años es defender el establecimiento de ayuntamientos fuertes, que tengan una mayor capacidad política de decisión, que posean competencias y recursos económicos suficientes para poder buscar alternativas a los conflictos sociales. De esta forma, en su opinión, se contribuirá a construir una sociedad más tolerante, más abierta, más integradora y solidaria. En este sentido, Taberna apuesta por impulsar los Consejos de Salud Municipal, para que se conviertan en canal para el análisis de los problemas de la salud del municipio, las propuestas de solución y su priorización. Abogan también por analizar la cartera de servicios, tanto de Primaria como de Especializada, su contenido y su cumplimiento, y porque los ayuntamientos participen en los órganos de dirección y control de las estructuras del servicio de salud de cada comunidad autónoma.
Sólo seis de los actuales consejeros
de Sanidad, en las listas electorales
En las próximas elecciones autonómicas, convocadas para el 27 de mayo en 13 comunidades autónomas, sólo seis consejeros actuales de Sanidad figuran en las correspondientes listas electorales de sus partidos, de acuerdo con la información facilitada por sus respectivos gabinetes.
De entre los que figuran en tales listas, destaca el consejero de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que va como cabeza de lista, es decir, candidato a la Presidencia de la Junta, por el Partido Socialista (PSOE). Por otro lado, y según señalan desde Canarias, la actual vicepresidenta del Gobierno Canario y consejera de Sanidad, Mar Julios, incluida en las listas de Coalición Canaria, es la candidata de esta formación para presidir el Parlamento autonómico.
La consejera de Baleares, Aina Castillo, aparece en el número 6 del Partido Popular (PP). Manuel Lamela, el consejero de Madrid, ocupa el último lugar, el 120, en la lista del PP para la Asamblea de la Comunidad de Madrid. María Kutz, de Navarra, va de número 5 en la lista de la Unión del Pueblo Navarro. y el consejero valenciano, Rafael Blasco, figura en el número 7 de la lista del PP en las elecciones para la Asamblea de la Comunidad Valenciana.
En consecuencia, no van en las listas electorales María Luisa Noeno (Aragón), Rafael Sariego (Asturias), Charo Quintana (Cantabria), Roberto Sabrido (Castilla-La Mancha), César Antón (Castilla y León), María Teresa Herranz (Murcia) y José Ignacio Nieto (La Rioja).