Investigadores del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio (UT Health San Antonio), en Estados Unidos, relacionan la obesidad con 21 genes relacionados con el Alzheimer, proporcionando una posible explicación mecanicista de por qué esta enfermedad es a veces más frecuente entre los adultos que experimentaron obesidad en la mediana edad, según publican en la revista 'Alzheimer s & Dementia'.
El equipo de investigadores analizó 74 genes relacionados con el Alzheimer a partir de los datos de 5.619 participantes en el Framingham Heart Study. De esos genes, 21 estaban subexpresados o sobreexpresados en la obesidad. La expresión génica es la activación de un gen en una célula para que cumpla funciones como la fabricación de una proteína.
El estudio halló que trece genes relacionados con el Alzheimer estaban asociados con el índice de masa corporal (IMC). Ocho genes se asociaron a una segunda medida de la obesidad denominada relación cintura-cadera.
'Varios de los genes estaban más fuertemente relacionados con la obesidad en la mediana edad que en la edad avanzada, y también con la obesidad en las mujeres que en los hombres', explica Claudia Satizabal, del Instituto Glenn Biggs de Alzheimer y Enfermedades Neurodegenerativas de UT Health San Antonio, y autora correspondiente del estudio.
Estas observaciones están en consonancia con estudios epidemiológicos anteriores que sugieren que la obesidad en la mediana edad puede ser un factor de riesgo de enfermedad de Alzheimer en las mujeres, asegura.
Curiosamente, las personas que desarrollan demencia tienden a perder peso entre cinco y diez años antes de la aparición de la enfermedad. Puede tratarse de una pérdida de peso no saludable provocada por la enfermedad. 'Creemos que es más importante abordar la obesidad y empezar a perder peso de forma saludable en la mediana edad, entre los 40 y los 50 años, cuando la obesidad puede estar afectando a la expresión de los genes que estudiamos', subraya Satizabal.
El IMC es el marcador clásico de la obesidad, pero algunos estudios sugieren que el cociente cintura-cadera, que mide la obesidad abdominal (grasa del vientre), es un marcador más sensible de la desregulación metabólica en los individuos. La obesidad es un componente del síndrome metabólico y uno de los principales factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares e ictus.
Obesidad y Alzheimer
Vinculan la obesidad a genes relacionados con el Alzheimer

El Médico Interactivo
24 de febrero 2023. 10:31 am