Redacción.- 'No existe la generación espontánea de la nandrolona en el organismo a niveles lo suficientemente significativos para que se obtenga un positivo en un control antidopaje ', ha explicado el doctor Rafael Simó, especialista de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) y perteneciente al Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona.
En fechas recientes los medios de comunicación se han hecho eco de los casos de dopaje protagonizados por deportistas como el esquiador Johann Muehlegg, o el futbolista del Athletic de Bilbao, Carlos Gurpegui. Es frecuente, y así ha sucedido en el caso del jugador vasco, que se recurra al argumento de generación espontánea en el propio organismo del deportista como explicación del positivo tanto en el control inicial como en el contraanálisis, sin que tales afirmaciones se sustenten en argumentos sólidos desde el punto de vista científico. Es por esta razón que la SEEN desea puntualizar algunos aspectos relativos al dopaje con nandrolona, prohibido por las autoridades deportivas de todo el mundo.
'Pueden producirse falsos positivos cuando se ha consumido carne de animales tratados para el engorde artificial con nandrolona. Sin embargo, su presencia en sangre sólo se detecta durante las 24-48 horas posteriores a su ingestión, por lo que el contraanálisis no podría dar positivo, más aun transcurridos de siete a diez días desde el primer control', ha advertido este experto de la SEEN. Aunque es algo totalmente prohibido, algunos ganaderos utilizan esta hormona para acelerar el proceso de engorde los animales, concentrándose su presencia de forma habitual en la cola y el cuello, por lo que puede detectarse en la carne picada, las hamburguesas, los estofados y otros guisos en los que se utilice estas partes del animal.
'En consecuencia', concluye este especialista, 'si el contraanálisis continúa ofreciendo un resultado positivo, se descarta la procedencia de carne tratada'.
La nandrolona es una hormona cuyo efecto más llamativo es el aumento de la masa muscular, siempre y cuando su uso se realice acompañado, como es el caso de los deportistas, de ejercicio. Sin embargo, lo más preocupante del dopaje con nandrolona son sus efectos a medio y largo plazo. 'Además de un aumento de peso generado en parte por retención hídrica', explica el especialista de la SEEN, 'el uso continuado de esta hormona puede generar efectos adversos de mayor o menor gravedad: hepatitis tóxica, disminución transitoria de la potencia sexual, hirsutismo (en la mujer), aumento de la coagulación sanguínea y, como consecuencia, infartos y embolias. así como la muerte súbita sin causa clara del deportista'.