Un estudio del CNIC muestra que la función microvascular coronaria podría desempeñar un papel crucial en la predicción del riesgo cardiovascular a largo plazo
20 de septiembre 2024. 12:12 pm
Una nueva investigación publicada en ‘JACC: Cardiovascular Imaging’ revela que la presencia de factores de riesgo cardiometabólicos y la aterosclerosis subclínica afectan negativamente la función microvascular coronaria, lo que podría incrementar el riesgo de progresión de la aterosclerosis. Se trata de un estudio realizado en…
Una nueva investigación publicada en ‘
JACC: Cardiovascular Imaging’ revela que la presencia de factores de riesgo cardiometabólicos y la aterosclerosis subclínica afectan negativamente la función microvascular coronaria, lo que podría incrementar el riesgo de progresión de la aterosclerosis. Se trata de un estudio realizado en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), que proporciona información crítica sobre cómo los factores de riesgo cardiometabólicos y la aterosclerosis subclínica - presencia de placas de grasa en una o más arterias antes de que existan signos o síntomas- afectan la red de microvasos que irrigan el corazón en individuos asintomáticos de mediana edad.
Para ello, el estudio ha evaluado la
función microvascular coronaria en 453 personas asintomáticas de mediana edad mediante resonancia magnética cardíaca para medir el flujo sanguíneo miocárdico en reposo y bajo estrés. La función microvascular coronaria es la capacidad de los pequeños vasos del corazón para regular el flujo sanguíneo y suministrar oxígeno, crucial para la salud cardíaca.
Función microvascular coronaria alterada
Los resultados muestran que
factores como el síndrome metabólico, la resistencia a la insulina y la diabetes se asocian directamente con una función microvascular coronaria alterada. Además, la presencia de aterosclerosis subclínica en arterias periféricas y coronarias se asocia negativamente sobre la función microvascular.
'Nuestros hallazgos sugieren que la función microvascular coronaria podría desempeñar un papel crucial en la predicción del riesgo cardiovascular a largo plazo en personas aparentemente sanas”, explica Ana Devesa, primera firmante del estudio. 'Es importante considerar la disfunción microvascular como un marcador temprano en la evaluación del riesgo cardiovascular”.
De esta forma, los investigadores concluyen que, en una gran cohorte de personas asintomáticas de mediana edad sin enfermedad isquémica del corazón, la presencia de factores de riesgo cardiometabólico y aterosclerosis sistémica se asocia con esta alteración. Cuanto
mayor es la carga de factores de riesgo cardiometabólico y la extensión sistémica de la aterosclerosis, mayor es el impacto negativo en la función microvascular coronaria. Además, una mejor función se asocia con un menor riesgo de progresión de la aterosclerosis.