Recuperar la paga extra recortada se convierte en objetivo común para CESM y SATSE

Las pagas extras de los profesionales sanitarios sufren un recorte desde hace ya un total de catorce años. Por eso, el Sindicato de Enfermería, SATSE, y la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) han aunado fuerzas para volver a visibilizar el agravio que supone este recorte. En concreto, tanto CESM y SATSE exigen al Gobierno que en los Presupuestos Generales del Estado para 2025 se cumpla estrictamente lo previsto en la legislación aplicable (Estatuto Marco del personal estatutario y Estatuto Básico del Empleado Público). Según este, todas las categorías deberían volver a cobrar las dos pagas extra en su totalidad. Los sindicatos médico y enfermero consideran que ya ha pasado el tiempo suficiente para que se corrija este agravio. Por ello,  valoran iniciar en los próximos meses acciones de reivindicación conjuntas y movilizaciones que permitan alcanzar la necesaria recuperación total de la paga extraordinaria que catorce años después se mantiene recortada.

Reclamos de CESM y SATSE

Desde CESM y SATSE informan de que en 2024 los médicos y el resto de profesionales del subgrupo A1 sufren un recorte del 38,29 por ciento en el importe del sueldo base y en el del trienio de las pagas extra. Esto supone una pérdida, en cada una de las pagas extra, de 508,08 euros en sueldo base y 19,54 euros por cada uno de los trienios que tenga consolidados el profesional.  Por su parte, a las enfermeras, fisioterapeutas y otros profesionales del subgrupo A2 se les aplica un recorte del 27,07 por ciento, lo que les supone perder en cada paga extra 310,57 euros en sueldo base y 11,28 euros por cada trienio consolidado. De esta forma, estos colectivos profesionales asumen en torno al 65 por ciento de todo el recorte realizado en las pagas extra de los empleados públicos del Sistema Nacional de Salud, evidenciando cómo los recortes son aplicados con carácter progresivo, en detrimento de estas categorías, mientras que las escasas subidas salariales de carácter general se aplican en el mismo porcentaje a todas las categorías. Además, suponen una pérdida de poder adquisitivo para los médicos y resto de profesionales del subgrupo A1 del 24,43 por ciento, mientras que las enfermeras y fisioterapeutas pierden un 20,10 por ciento.