José García. Madrid.- La ministra de Sanidad, Ana Pastor, se ha
comprometido a aprobar antes de que finalice el primer semestre de
2003 la aportación reducida para los medicamentos que necesitan los
pacientes con hipercolesterolemia familiar heterocigota. Si el Consejo
Interterritorial, en su próxima reunión, da el visto bueno a esta medida, el
coste de los fármacos para estos pacientes se reduciría de los 30 euros
mensuales actuales a tan sólo tres.
Así lo ha señalado, en declaraciones a EL MEDICO INTERACTIVO, el
presidente de la Fundación Española de Hipercolesterolemia Familiar,
Pedro Mata, quien recuerda que esta patología es una de las
enfermedades monogénicas más frecuentes. 'Se calcula que a los 60
años, el 75 por ciento de los pacientes afectados habrían sufrido un
infarto de miocardio. Además, si el diagnóstico y el tratamiento no son
los adecuados, su esperanza de vida es 20 ó 30 años inferior a la del
resto de la población. Al tratarse de una medicación de por vida y que
afecta a la mitad de los miembros de una misma familia, el tratamiento
farmacológico es costoso. Por todo ello, la necesidad de la aportación
reducida', explica Mata, internista de la Fundación Jiménez Díaz.
A su juicio, 'si tiene que haber alguna aportación dentro del sistema
sanitario, ésta es una de las más justificadas, al ser personas que
nacen con este trastorno genético. En España, hablamos de entre
80.000 y 100.000 afectados, que sufren la dolencia al tener el doble de la
cantidad normal de colesterol y de los que las dos terceras partes no
están correctamente tratados y tienen riesgo de sufrir un infarto
prematuro'. Mata, jefe asociado de Medicina Interna, Unidad de Lípidos,
de la Fundación Jiménez Díaz subraya que ésta sería una prestación de
'equidad social', con la que 'inicialmente se hace una inversión, pero a
medio y largo plazo se ahorra no sólo en vidas sino en gasto sanitario'.
La ministra de Sanidad, según Mata, está 'concienciada en el tema y se
ha marcado, dentro de las prioridades de su Departamento, la
prevención de la enfermedad cardiovascular'.
Biochip genético, para finales de junio
Por otra parte, la Fundación de Hipercolesterolemia Familiar confía en
que el biochip genético, que estará listo para su comercialización, según
previsiones, a finales del primer semestre de 2003, permita un
diagnóstico rápido de la enfermedad. Se trata de un microchip
desarrollado por una empresa de tecnología española en el que se ha
incluido la secuencia de ADN con las mutaciones más frecuentes de la
hipercolesterolemia en España, según ha explicado Mata.
En estos momentos, el microchip 'se va a presentar a la Agencia
Nacional de Nuevas Tecnologías y podría utilizarse ya a finales de junio',
destacó el presidente de la Fundación.