E.P., Madrid.- El Ministerio de Sanidad y Consumo está trabajando en la revisión del pacto firmado con Farmaindustria. Según ha informado la titular de este departamento, Ana Pastor, se están barajando varias propuestas, como la aplicación de protocolos clínicos a los profesionales para el uso de fármacos, con el fin de reducir este capítulo del gasto y mejorar el uso racional. Otras propuestas que está estudiando Sanidad son el ajuste de la dosis de los fármacos a la duración de los tratamientos (la unidosis); ampliar la presencia de los genéricos en el mercado; así como revisar los precios de referencia y de los fármacos genéricos.
En lo que se refiere a la unidosis, este departamento todavía está perfilando los detalles previos a su puesta en marcha. Pero la principal apuesta de Sanidad es el uso racional del medicamento y que 'los profesionales sanitarios utilicen los fármacos siguiendo protocolos, para que disminuya la diversidad en la práctica clínica'. El objetivo, recalcó, no es sólo disminuir los costes en esta materia, sino mejorar su uso.
En cualquier caso, Pastor reiteró que este pacto no se romperá. 'Como casi todo en la vida, los pactos son mejorables', valoró. En este sentido, está evaluando la evolución del gasto farmacéutico durante el año pasado, que se incrementó un 9,89 por ciento respecto a 2001, superando en casi cuatro puntos las previsiones del acuerdo firmado con Farmaindustria.
A su juicio, una parte importante del gasto se ha debido al aumento del número de recetas y otra parte 'menor' (tres puntos), a causa del incremento del precio medio por receta. La ministra señaló que los fármacos representan un coste importante del gasto sanitario, pero representan, 'sobre todo las innovaciones, una mejora de los tratamientos a los ciudadanos, no sólo en enfermedades que antes no tenían cura, sino en mejora de la calidad de vida'.
En la misma línea, Pastor señaló que su Ministerio está elaborando un informe sobre las causas que favorecen el incremento del gasto en medicamento. Entre estas señaló la incidencia de la gripe, el aumento de la población por el impacto de la inmigración y el envejecimiento. Algunas de ellas coinciden con el diagnóstico realizado por Farmaindustria, sin embargo, Sanidad quiere precisar la proporción de cada uno de estos factores en el incremento del gasto.