Redacción, Valladolid.-Según datos aportados por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), uno de cada tres menores de 16 años ha consumido alguna vez cannabis y el 8 por ciento de los jóvenes entre los 15 y los 24 años afirma haber tomado éxtasis en algún momento de su vida. En los últimos diez años se ha doblado el consumo de cocaína en España y los jóvenes de entre 14 y 18 años que la ha probado en los últimos 12 meses han aumentado de un 1,8 por ciento en 1994 a un 6,8 por ciento. en 2004. Dichos datos ponen de relieve, según la semFYC que "el primer contacto con la droga se produce a edades cada vez más tempranas, circunstancia que incrementa el riesgo de dependencia".

La situación es preocupante, según esta Sociedad Científica, en la medida que hay una falta de percepción del riesgo real entre los consumidores de cannabis. "De hecho, en la actualidad el cannabis está considerado socialmente una droga de bajo riesgo", tal como aseguró el doctor Luis Aguilera, presidente de la semFYC, en el marco de las V Jornadas de Actualización en Medicina de Familia, celebradas recientemente en Valladolid, bajo la organización de esta entidad y con el patrocinio de Novartis.

El presidente de la Sociedad Castellana y Leonesa (socalemFYC), el doctor Miguel Ángel Díez, subrayó, por su parte, que "las Administraciones deben orientar y financiar la formación continuada de los profesionales y las Sociedades científicas, aportar los contenidos y la metodología". "Incluso "prosiguió- una parte importante del dinero que la industria farmacéutica destina a la promoción de los medicamentos debería dar soporte a la formación continuada".

Además de conocer los nuevos patrones de consumo, la sesión dedicada a las drogodependencias abordó también qué hacer ante intoxicaciones agudas o cómo identificar a los adolescentes que empiezan a consumir drogas.

Así, según el coordinador del Grupo sobre Drogodependencias de esta Sociedad, el doctor José Zarco, "el médico de familia se encuentra en una situación privilegiada para detectar el problema prestando especial atención a una serie de signos que alertan de una posible ingesta de sustancias tóxicas entre adolescentes". "Por lo general- continuó este experto- son los padres quienes nos lo comunican porque advierten los cambios bruscos de conducta y de humor en el hogar, fracaso escolar, alteraciones en el apetito, los trastornos de sueño, deterioro de los hábitos higiénicos, etc. Nuestra labor es ganarnos su confianza y que sea él mismo el que comente su problema. Llegar hasta ahí requiere saber escuchar, desdramatizar e informar con fines educativos haciéndole saber las repercusiones que sobre la salud tiene las drogas y, sobre todo, las ventajas que trae consigo su abandono".

Por su parte, el vicepresidente de semFYC Asensio López Santiago señaló que la intervención del profesional de Atención Primaria debe centrarse en ofrecer orientación a aquellas familias que viven en circunstancias que puedan favorecer el desarrollo de una drogodependencia procurando lograr una detección precoz del problema.

"No obstante "subrayó este médico de familia- las Administraciones son responsables del abandono de políticas de prevención y, desde semFYC, consideramos imprescindible que se tomen decisiones urgentes dirigidas a aumentar los presupuestos en actividades de prevención y, especialmente, las dirigidas a los adolescentes".

Nuevos patrones de consumo

El patrón de consumo de las personas con un problema de adicción a las drogas ha cambiado y con él también el perfil del actual usuario de drogas, que ahora se encuentra más integrado socialmente que antes. En la actualidad, el consumo se ha desvinculado de la marginalidad y se puede, incluso, hablar de personas con éxito profesional, que consumen sobre todo cocaína, o de jóvenes que experimentan con drogas de síntesis.

En ambos casos, tanto en el tabaco como en el resto de drogas, su consumo empieza entre los más jóvenes como un experimento de carácter lúdico que, como explica el doctor Zarco, "luego pasa por una fase de abuso y, en última instancia, puede convertirse en una adicción a una determinada sustancia". "En estos casos -indicó este experto- los médicos de familia jugamos un papel fundamental, no sólo porque el primer contacto del paciente con la red asistencial se hace a través de la Atención Primaria, sino porque la tendencia a la normalización que ha experimentado el consumo de drogas en las últimas décadas nos va a exigir respuestas a nuevas demandas y una mayor colaboración en la implantación de programas preventivos y de información al paciente. No olvidemos que la labor del médico de familia comienza mucho antes de que el paciente manifieste su dependencia".

Teniendo en cuenta que los médicos de familia son los más cercanos a los ciudadanos, el doctor López Santiago considera imprescindible "actualizar nuestros conocimientos sobre los nuevos hábitos y sustancias que se consumen. en cualquier caso, el alcohol y el tabaco continúan siendo las drogas que más problemas generan entre los jóvenes. De hecho, más de un 40 por ciento de los jóvenes de 16 a 18 años son fumadores".

La reunión, en definitiva, permitió a los más de 300 facultativos asistentes actualizar sus habilidades prácticas y conocer los últimos avances científicos sobre problemas de salud, como la menopausia, la insuficiencia cardíaca o la diabetes o a hacer frente a situaciones de violencia doméstica. Tal como indicó al respecto el doctor Aguilera, "estas sesiones de actualización están diseñadas para dar respuesta a las necesidades de salud de los ciudadanos. "Los médicos de familia "añadió- que asisten siempre las han valorado de forma muy positiva, por lo que desde semFYC vamos a seguir potenciándolas. De hecho, para el año que viene está previsto que se organicen cinco nuevas jornadas en otras ciudades españolas".