Un estudio realizado en

cerca de 1.000 hombres y

mujeres que habían viajado

más de una vez en avión y publicado

en la revista científica

Cephalalgia, ha puesto de manifiesto

que casi el 6 por ciento

había sentido dolor de cabeza

durante el vuelo. Dos

tercios de estas personas eran

mujeres y una tercera parte tenía

antecedentes familiares de

cefalea. El equipo de investigadores

autores de este estudio

estima que cada año más de

100 millones de pasajeros podrían

verse afectados por esta

dolencia.

Causas

Varios son los factores que pueden

favorecer la aparición de

cefaleas durante el vuelo, entre

ellos el estrés. Así, el simple hecho

de tener que preparar la

maleta a última hora, el temor

de no llegar a tiempo a la facturación

o al embarque, o el

miedo que muchas personas

tienen a volar, puede generar

cuadros de ansiedad que se traducen

en cefaleas tensionales.

Las malas posturas, las

contracturas y los dolores cervicales

que se producen a veces

por el escaso espacio en

cabina también pueden derivar

en dolores de cabeza. Los

posibles desajustes horarios,

los cambios de presión atmosférica

y de altitud, sobre todo

durante el despegue y el aterrizaje,

la mala calidad del aire

dentro del avión o el ruido del

motor también forman parte

de la lista de desencadenantes,

así como el ayuno y el no

respetar los horarios de comidas,

sobre todo en el caso de

personas proclives a tener crisis

de migraña.