La enfermedad del olvido, tal
y como se conoce al Alzheimer,
es más que un problema
de memoria. Actualmente en
España hay cerca de 400.000
personas que padecen este
trastorno, pero el verdadero
drama es para los cuidadores
de estos enfermos. En total, entre
cuidadores y pacientes, se
calcula que son más de tres millones
de afectados. Científicos,
familiares y médicos mantienen
la esperanza en la lucha contra
esta enfermedad.
También podría describirse
el Alzheimer como la enfermedad
desconocida. Y es que, a
día de hoy, las causas siguen
siendo un enigma para la comunidad
científica, y tan sólo
se habla de "factores de riesgo"
para su aparición. A este respecto
el doctor Luis Agüera, de
la Unidad de Investigación Proyecto
Alzheimer Fundación Reina
Sofía, señala que "ningún
factor es determinante, pero
los más claros hasta ahora son
la edad, el sexo femenino, la
hipertensión arterial, historia de
traumatismos craneoencefálicos,
episodios de depresión y
poseer una de las variantes genéticas
del ApoE".
Por el momento, la única
causa conocida de la aparición
de esta enfermedad es la genética;
sin embargo los casos relacionados
directamente con la
herencia familiar suponen tan
sólo el cinco por ciento. Según
el doctor Jesús Ávila, profesor
del Centro de Biología Molecular
Severo Ochoa (CSIC-UAM),
los orígenes de la enfermedad
pueden ser varios, aunque ninguno
determinante. En aquellos
casos que se conocen, como es
el caso de la enfermedad de Alzheimer
de origen familiar, entre
los primeros pasos que tienen
lugar está la activación de una
proteína, y dado que dicha activación
puede ser tóxica, se está
estudiando cómo prevenirla".
De hecho el reciente descubrimiento
de tres genes asociados
al desarrollo de la enfermedad
ha abierto una nueva vía de
investigación en su prevención,
y es que todos los expertos señalan
precisamente la prevención
como el mayor reto al que
se enfrentan en el tratamiento
del Alzheimer. Según declara el
doctor Guillermo García Rivas,
vocal del grupo de Estudio del
trastorno de la Demencia de la
Sociedad Española de Neurología,
"la idea es detectar la
enfermedad lo antes posible y
eliminar las células tóxicas que
favorecen su desarrollo".
Prevención y diagnóstico
son las dos palabras que más se
repiten y es que el Alzheimer sigue
siendo una enfermedad
muy infradiagnosticada. "El problema
es que los síntomas se
asocian a los propios que acompañan
al envejecimiento, como
puede ser la demencia, es decir,
la pérdida de la capacidad del
recuerdo", declara García Rivas.
La figura
del cuidador
Pero el verdadero problema de
esta enfermedad, según señalan
las asociaciones de pacientes y
familiares, lo sufren los cuidadores.
Blanca Clavijo, Presidenta de
la Asociación Nacional del Alzheimer
AFALcontigo, explica
que "nos encontramos frente a
un problema social, sanitario y
económico muy importante. Un
gran número de mujeres tienen
un hijo único cuando ya son
mayores. Eso supone que en
breve personas de 30 años deberán
atender a su madre o padre
con demencia. Obviamente,
no podrán. La figura del cuidador
familiar va a escasear mucho
en el futuro y habrá que sustituirlo
por otros recursos", señala.
En este sentido, la Confederación
Española de Familiares de
Enfermos de Alzheimer y otras
Demencias (CEAFA) ha pedido a
las administraciones que impulsen
la promoción y desarrollo
de los recursos específicos de
atención a personas con la enfermedad
de Alzheimer, haciendo
hincapié en la importancia
que está cobrando la figura del
cuidador en la sociedad.