" Es importante tomar el
sol con moderación, en horarios
que no sean dañinos y utilizando
cremas solares de alta
protección. De esta forma se
evitará la aparición de manchas
en la piel.
" Los ejercicios suaves
son muy beneficiosos durante
el embarazo. Por ejemplo,
la natación es un deporte muy
saludable ya que fortalece la
musculatura, proporciona elasticidad
a las articulaciones, no
se realizan movimientos bruscos
y, además, refresca. Recuerde
que en el agua pesamos
menos y movernos en ella es
más fácil para una gestante.
" Con el calor, la futura
mamá debe mantenerse bien
hidratada. Es recomendable
ingerir alrededor de 2 litros
diarios de agua. Además, gracias
a ella, algunos de los síntomas
provocados por los cambios
hormonales mejoran o,
por lo menos, no empeorarán:
estreñimiento, piernas hinchadas
y cansadas, regulación de
la temperatura corporal, etc.
" Dieta equilibrada y comidas
ligeras. En la dieta de
una embarazada no debe faltar
ni la calidad ni la variedad de alimentos,
por tanto deberán estar
presentes cereales, frutas, verduras,
pescado (fundamentalmente
azul, que contienen grasas
más saludables), carnes, huevos
y lácteos. Con la llegada del calor,
lo ideal es optar por platos
fríos, como las ensaladas de legumbres,
verduras, gazpachos y
frutas variadas. En vacaciones es
habitual salir a comer fuera. recuerde
aumentar las precauciones
a la hora de elegir el menú.
En cualquier caso, debe recordarse
que comer "para dos" no
significa en modo alguno que
haya que comer "por dos".
" Vestir y calzar de forma
cómoda y fresca. Cuando
se espera un bebé, el calor del
verano puede resultar más sofocante
que nunca. Los tejidos
naturales, como el algodón o
el hilo, permiten que traspire
mejor la piel y alivian la sensación
de calor. Asimismo, es
mejor llevar ropa holgada y de
colores claros ya que absorben
menos la radiación solar. En
cuanto al calzado, las sandalias
son una opción ideal, ya que
no comprimen el pie.
" Mantener la casa fresca.Un truco para mantener la
casa fresca, si no se dispone
de aire acondicionado, es abrir
las ventanas a primera hora de
la mañana y mantenerlas cerradas
hasta el atardecer. Las
duchas de agua fría o tibia o
sumergir los pies en agua fría
son otra fórmula para aliviar la
sensación de calor. Hágalo poco
a poco. los cambios bruscos
de temperatura no son recomendables"
ni en verano.
" Masajes para mejorar
la circulación. El masaje durante
el embarazo (previa consulta
con el ginecólogo) puede resultar
muy beneficioso, ya que
ayuda a eliminar la retención
de líquidos, a relajar los músculos
y a mejorar la circulación.
Además, no estar mucho tiempo
parada en pie, no cruzar las
piernas al sentarse, elevar los
pies en la cama o acostarse de
lado ayuda a disminuir la hinchazón
de las piernas.
" Evitar viajes largos.
Durante el final del embarazo
es más incómodo moverse y
permanecer sentada durante
mucho tiempo. Si el viaje es
en coche una buena pauta es
no viajar a más de 5 o 6 horas
seguidas en el día y es importante
parar cada 2 horas para
dar un pequeño paseo. Si el
viaje es en avión, recuerde hacer
gimnasia moviendo los
pies y flexionando las rodillas,
aún estando sentada, durante
unos cinco o diez minutos por
cada hora de vuelo.
FUENTE: Dr. José Luis Neyro para
Clearblue. P&.G.