La dieta mediterránea tradicional,
rica en aceite de oliva, cereales,
frutas, frutos secos, vegetales
y pescado, proporciona
una protección sustancial frente
a la diabetes tipo 2, según
un estudio dirigido por Miguel
Ángel Martínez González de la
Universidad de Navarra, publicado
en la edición digital de la
revista British Medical Journal.
Los autores del estudio
analizaron los hábitos dietéticos
y de salud de 13.000 personas
sin antecedentes de diabetes.
Cada dos años los
participantes recibían cuestionarios
de seguimiento sobre la
dieta, el estilo de vida, los factores
de riesgo y los trastornos
médicos. Los nuevos casos de
diabetes se confirmaron a través
de informes médicos.
Durante el periodo de seguimiento
de cuatro años y
medio los investigadores descubrieron
que los participantes
que seguían con fidelidad
la dieta tenían un menor riesgo
de diabetes. Una alta adherencia
a este tipo de alimentación
se asociaba con un 83
por ciento de reducción en el
riesgo de desarrollar diabetes.