Los adultos pasamos más dela mitad de nuestras horasde actividad en el trabajo. Porello, un entorno laboral que fomenteunos hábitos sanos puedereducir el riesgo de padecermuchas enfermedades, entreellas las cardíacas y accidentescerebrovasculares, que constituyenla primera causa demuerte en el mundo, con 17,2millones de víctimas cada…
Los adultos pasamos más de
la mitad de nuestras horas
de actividad en el trabajo. Por
ello, un entorno laboral que fomente
unos hábitos sanos puede
reducir el riesgo de padecer
muchas enfermedades, entre
ellas las cardíacas y accidentes
cerebrovasculares, que constituyen
la primera causa de
muerte en el mundo, con 17,2
millones de víctimas cada año.
'En los últimos años, gracias
a las campañas llevadas a
cabo desde la Fundación Española
del Corazón (FEC) y al esfuerzo
de los especialistas, hemos
avanzado mucho en el
terreno de la prevención de las
enfermedades y accidentes cardiovasculares,
pero no podemos
bajar la guardia, y creemos
que el lugar de trabajo es una
pieza clave para tomar medidas
e iniciar hábitos cardiosaludables',
apunta el doctor Leandro
Plaza, presidente de la FEC. Por
este motivo, el Día Mundial del
Corazón 2009, instaurado para
informar a las personas de la
importancia de cuidar su corazón,
lleva como lema 'Trabajar
con corazón', aludiendo a los
pequeños cambios que podemos
introducir en nuestra actividad
laboral cotidiana para
mejorar nuestra salud cardiovascular.
En este sentido, la
campaña del Día Mundial del
Corazón se ha centrado en el
control de los factores de riesgo
en el propio entorno laboral
(hipertensión, hipercolesterolemia,
obesidad, sedentarismo y
tabaquismo), lo que resulta fundamental
para conseguir una
disminución progresiva de estas
enfermedades.
Según el doctor José Luis López-
Sendón, jefe del Servicio de
Cardiología del Hospital Universitario
La Paz, para conseguir un
entorno profesional más saludable
basta con seguir unas sencillas
pautas basadas en el tabaco,
la alimentación y el ejercicio:
Incluir el ejercicio físico
en la agenda. Basta con
dar un paseo alrededor del
edificio, escoger las escaleras
en lugar del ascensor o hacer
algo de deporte en la pausa
de la comida.
Esforzarse por comer
de forma saludable. Hay que
saber escoger los menús más
adecuados a la hora del almuerzo,
incluso trayendo de casa la
comida si no es posible reducir
la ingesta de grasas en la cafetería
del trabajo. Las empresas
pueden comprobar que todos
los días se ofrezcan menús saludables
e incentivar el consumo
de alimentos sanos cambiando
la bollería industrial por una
cesta de frutas naturales a disposición
de los empleados.
Crear un entorno sin
humo. Para prevenir las enfermedades
cardiovasculares es
necesario evitar el hábito del
tabaquismo. Las empresas deben
evitar el consumo de tabaco
en el entorno de trabajo y
sus alrededores para contribuir
al bienestar de sus empleados.
El cuidado del corazón en
el ámbito laboral trae consigo
una serie de ventajas. 'El primer
beneficio es que se salvan vidas:
casi la mitad de las personas
que fallecen por enfermedades
cardíacas y accidentes cerebrovasculares
se encuentran en un
periodo productivo de su vida:
entre 15 y 69 años', apunta el
doctor López-Sendón.
Por otra parte, la introducción
de hábitos de vida saludables,
como la realización de
una actividad física regular, favorece
la concentración y la
agilidad mental. 'Al mantener
el cuerpo activo, cuando tenemos
que enfrentarnos a una situación
de estrés laboral la
mente y el cuerpo se relajan y
la tensión acumulada se reduce,
lo que baja el riesgo de padecer
una enfermedad cardiovascular.
Y, además, las actividades colectivas
son ideales para estrechar
lazos con los compañeros de
trabajo', afirma Leandro Plaza.
En opinión de este especialista,
la salud cardiovascular de la
plantilla también incide directamente
en los resultados económicos
de las empresas. 'Una
plantilla sana puede contribuir,
de muchos modos, a la salud de
la empresa, incluso en momentos
de crisis económica', afirma.
En una empresa sana se registra
un aumento de la productividad,
la reducción de la tasa de absentismo,
se reducen los gastos médicos,
disminuyen los accidentes
laborales, mejora la imagen corporativa,
se crea un buen ambiente
de trabajo y se amplía el
tiempo de permanencia del personal
en la empresa.