Los niños menores de dieciocho
meses no deberían viajar
a países tropicales, porque muchas
veces no tienen puestas todas
las dosis obligatorias incluidas
en el calendario vacunal y
corren un mayor riesgo al desplazarse
a países endémicos. A
pesar de esta recomendación,
uno de cada cuatro niños que
acuden a las consultas pediátricas
de vacunación del viajero tienen
menos de dos años, según
advierte la doctora Milagros García
Hortelano, médico pediatra
de la Unidad de Pediatría Tropical
y Consulta del Niño Viajero
del Hospital Carlos III de Madrid.
En este sentido, el doctor
Francisco Giménez, pediatra de
la Unidad de Infectología Pediátrica
del Hospital Torrecárdenas,
recalca que antes de emprender
un viaje con un niño pequeño
hay que tomar las precauciones
necesarias. 'En el caso de ir a
zonas exóticas, con riesgo sanitario,
los padres con sus hijos
deberían pasar por los departamentos
de vacunación del viajero
para que los profesionales
asesoren sobre la inmunización
o profilaxis pertinente'.
Este experto también insiste
en que 'las vacunas deben ser
prescritas por un profesional sanitario
porque tienen que administrarse
en función de la
edad, el peso y la historia clínica
del menor'. Hay que prestar
una atención especial a ciertos
grupos de riesgo, como pueden
ser los niños con el sistema
inmunitario deprimido, los asmáticos,
los que tienen alergia
al huevo (muchas vacunas usan
huevo en su proceso de elaboración)
o los que tienen dermatitis
atópica, ya que el uso de
los repelentes de mosquitos
pueden exacerbar esta afección
cutánea, entre otros grupos. Lo
ideal sería acudir a estas consultas
específicas con un mes o
mes y medio de antelación porque
hay algunas vacunas que
necesitan más de una dosis.