La tasa de supervivencia en

el cáncer de mama se incrementa

si la paciente se somete

a un tratamiento de

radioterapia tras serle extirpado

el tumor, según un estudio

realizado por un grupo

de investigadores de la Universidad

de Oxford (Reino

Unido). El riesgo de desarrollar

de nuevo el cáncer en

los cinco años siguientes a la

extirpación del tumor se reduce

de un 26 a un 7% si se

ha recurrido a un tratamiento

de radioterapia, señalan dichos

investigadores. También

decrece el riesgo de morir a

consecuencia de la enfermedad

en los quince años siguientes.

Los investigadores, que estudiaron

los casos de 40.000

mujeres en todo el mundo, revelan

que el tratamiento con

radioterapia es beneficioso para

las pacientes que se han sometido

a una mastectomía (extirpación

del pecho), si el tumor se

ha extendido a la axila. En estos

casos, el riesgo de que el cáncer

se reproduzca se reduce de

un 23 a un 6%. Sin embargo,

si el tumor no se ha extendido

a la axila, los beneficios de la

radioterapia son pequeños y superados

por los efectos secundarios

de dicho tratamiento.