La musicoterapia es una técnica
que utiliza la música en
distintas vertientes (escuchar
música, el canto, la improvisación
musical utilizando todo tipo
de instrumentos y la danza) para
mejorar el funcionamiento físico,
psíquico y social. Se ha mostrado
muy eficaz como ayuda a
personas con determinados problemas
físicos o psicológicos.
Uno de los campos donde
mayores logros está obteniendo
esta disciplina es con personas
mayores, ya que en esta
etapa de la vida se produce
un aumento de la interioridad,
las personas tienden a
encerrarse en sí mismas, pierden
interés por lo que les rodea
y se produce una disminución
de la autoestima. La
música les va a ayudar a sentirse
mejor y por consiguiente
a superar este estado.
En algunas residencias de
la tercera edad se organizan
sesiones en grupo de musicoterapia,
utilizando la música
como estímulo para facilitar la
comunicación. En ocasiones se
persigue despertar emociones
a través de canciones que recuerden
momentos del pasado
o para favorecer el mantenimiento
de la memoria; en
otras ocasiones se pretende
enfocar la sesión hacia la estimulación
del movimiento mediante
melodías rítmicas.
Con ello se pretende superar
problemas de soledad, aburrimiento,
temor a la muerte o
estancamiento personal.
Otras áreas
La terapia musical también se
utiliza para ayudar a combatir
diversos problemas de salud.
Se ha demostrado cómo la
música puede hacer disminuir
el dolor, reducir la ansiedad y
el estrés.
Actualmente se han hecho
estudios con pacientes
que han sido sometidos a una
operación quirúrgica, demostrándose
que los que practicaron
esta técnica antes de la
operación sintieron menos
dolor y menos temor. También
se han obtenido resultados
muy positivos en sesiones
a enfermos de Alzheimer o esquizofrenia.
La musicoterapia
también se utiliza en las mujeres
embarazadas para la
preparación al parto, ya que
es un importante factor de
relajación.